Caos en Wall Street: una start-up china da vuelta el tablero a las tecnológicas y hunde el mercado
Una start-up china llamada Deep Seek desarrolló una IA similar a ChatGPT con una inversión menor a 6 millones de dólares. Desconcierto en el mundo de la IA.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Una empresa china, Deep Seek, se metió como un elefante en un bazar en el mundo de la inteligencia artificial y dejó temblando a las grandes tecnológicas. Nvidia, que hasta el viernes era la joyita del mercado, perdió en cuestión de minutos casi 490 mil millones de dólares de valor.
En el premercado, el índice Nasdaq (que representa a las empresas tech) se desplomó más del 4%, mientras que otros como el S&P 500 y el Dow Jones también arrancaron para abajo. Empresas como Meta (Facebook) y Microsoft no zafaron: sus acciones cayeron cerca de un 6%.
La compañía china asegura que entrenar su modelo R1 les costó apenas 5,6 millones de dólares. Puede sonar mucho, pero si lo comparamos con los miles de millones que invierten los americanos, es un vuelto.
Esto pone en duda si Nvidia podrá seguir creciendo al ritmo que venía. Desde 2022, sus acciones habían subido más del 900% gracias al boom de la inteligencia artificial, pero parece que esa fiesta se acabó.
El CEO de Nvidia, Jensen Huang, venía hablando de la IA como la "nueva revolución industrial", convencido de que era solo el principio de una década de expansión. Pero ahora, con este golpazo, quizás tenga que repensar ese discurso.
Deep Seek también dejó boquiabiertos a los expertos por abrir su tecnología al público como código abierto. Este paso audaz generó revuelo en redes y provocó debates entre los peces gordos de Silicon Valley. Algunos opinan que esto podría ser una llamada de atención para Estados Unidos, que deberá acelerar sus desarrollos y ajustar estrategias para no quedarse atrás en esta carrera tecnológica.
Mientras tanto, Nvidia, que empezó en los '90 fabricando placas de video para juegos, ve cómo su dominio tambalea. ¿El motivo? Una empresa que con menos recursos y más creatividad está cambiando las reglas del juego.
Esta noticia deja claro que en el mundo tech no importa cuánto dinero tengas: si aparece alguien con una idea más revolucionaria y barata, te puede bajar de un hondazo en dos segundos. Ahora queda esperar para ver cómo reaccionan las grandes empresas y qué impacto tendrá esto en el mercado a largo plazo.