Una oportunidad que Argentina no puede desaprovechar
Estamos ante un récord de ocupación hotelera y es esperable que en los próximos meses esto se incremente aún más.
La crisis energética por la que atraviesa Europa, debido a la guerra de Ucrania y la cercanía del invierno en esa región, sumada a la competitividad del tipo de cambio que actualmente tenemos, hace de Argentina el destino más buscado por los europeos que quieren escapar del crudo invierno.
Estamos ante un récord de ocupación hotelera y es esperable que en los próximos meses esto se incremente aún más. Como consecuencia, todos los rubros asociados al turismo se verán favorecidos por este hecho, lo que constituye una oportunidad sin precedente para nuestra economía.
Esto no significa que esperamos que la guerra en Ucrania se mantenga. Sabemos que hay muchas personas que la están pasando mal, muchas vidas se han perdido y muchas familias han tenido que exiliarse. Una guerra no es algo deseable, pero es una realidad, y esta realidad está dándonos una oportunidad de salir de nuestro estancamiento económico.
La actividad turística para Argentina representa una industria con un potencial enorme. Tenemos una diversidad geográfica única que nos permite ser altamente competitivos. Hay opciones para todos los gustos. Desde las imponentes cataratas de Iguazú, el glaciar perito Moreno, la inigualable geografía del noroeste de nuestro país, la región de Cuyo con sus viñedos de calidad mundialmente reconocida, hasta la extensa Patagonia con sus paisajes que no tienen nada que envidiarles a los paisajes suizos. Todo ello en un marco único coronado por la calidez y hospitalidad latina que nos caracteriza.
Argentina está a las puertas de convertirse en el destino más visitado y esto nos brinda una oportunidad que no podemos desaprovechar. Hay una inagotable fuente de riqueza que, si somos capaces de explotar adecuadamente, nos beneficiará ampliamente. Es por ello por lo que debemos ser conscientes de esta oportunidad y debemos redoblar nuestros esfuerzos para volvernos el destino elegido por quienes buscan una alternativa de ocio. Tenemos los recursos. Tenemos ciudades como Buenos Aires, Rosario y Mendoza que no tienen nada que envidiarles a las principales capitales del mundo, y tenemos, sobre todo, una calidez humana y de servicio que es mundialmente reconocida.
Si hacemos las cosas bien, lograremos repuntar nuestra economía gracias al turismo internacional. Eso significa más fuentes de trabajo y mayor bienestar para toda la población, porque el turismo no solo favorece al sector hotelero, el sector gastronómico también se ve beneficiado por el turismo, al igual que el sector de transporte y de consumo masivo. Es decir, la rueda comienza a girar y esa rueda es parte de un engranaje mayor que moviliza a la economía en su conjunto.