La Unión Europea suspende por 90 días los aranceles que tenia previstos contra EEUU
La tregua por tres meses llega luego del anunció de Trump del día de ayer. La Casa Blanca confirmó hoy miércoles que los aranceles contra China siguen y ahora son del 145% en vez del 125%.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
La Unión Europea decidió poner en pausa, por 90 días, la primera tanda de medidas que tenía listas como respuesta a los aranceles que Estados Unidos ya le enchufó al acero y al aluminio. ¿La idea? Darle una chance al diálogo con los norteamericanos. Todo esto se dio justo después de que el propio Trump largara una especie de "tregua parcial", bajando un poco el tono por ese mismo plazo.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, salió a decir que tomaron nota del gesto de Trump y que están dispuestos a sentarse a charlar. Pero también avisó que si la cosa no avanza, vuelven con todo: “Todas las opciones siguen sobre la mesa”, dijo con cara de póker.
Trump, por su parte, al final se hizo el bueno y dijo que la pausa es para que se pueda encaminar la economía mundial. Mientras tanto, en Bruselas se toman este respiro para ver cómo sigue la cosa con los países miembros y con las industrias que están en el medio del baile.
Desde Hungría, el canciller Szijjarto se agrandó y dijo que ellos fueron los únicos en no bancar las represalias contra EE.UU. y que, al final, tenían razón. “¡La calma estratégica gana!”, gritó.
La verdad es que la UE viene medio golpeada por tres rondas de aranceles que les clavó la administración de Trump. Ahora está tratando de mantener el equilibrio entre no dejarse pisar y buscar algún tipo de arreglo.
En marzo, el presidente ya había impuesto tasas del 25% al acero, al aluminio y también a los autos importados. Y hace poco largó otra tanda: 20% a un montón de productos europeos. Todo eso ya está en marcha.
La “pausa” que anunció Trump ahora solo baja los aranceles a un 10% para algunos países que se mostraron dispuestos a negociar y que no reaccionaron con más medidas. Pero los impuestos a los autos, al acero y al aluminio europeos siguen firmes.
Y mientras tanto, a China la dejó afuera del trato. No solo eso, sino que encima le subió los aranceles a un brutal 145%. Desde Pekín salieron a decir que eso va a desestabilizar todo, y que si no hay respeto mutuo, ellos están listos para seguir peleando.