Inflación en EE.UU. sorprende a la baja y da un respiro a los mercados: ¿Qué significa para inversores y consumidores?
La inflación en Estados Unidos dio un paso más hacia la normalización. Cómo impactan estas cifras en los mercados financieros.
Por Eduardo Ramos Romero
Analista de mercados de VT Markets
La inflación en Estados Unidos dio un paso más hacia la normalización. El índice de precios al consumidor (IPC) de abril creció solo un 0.2% mensual, por debajo de las expectativas del mercado (0.3%), mientras que el dato anual se situó en 2.3%. El IPC subyacente, que excluye alimentos y energía, también subió un 0.2% mensual y se mantuvo en 2.8% anual. Son cifras que no solo alivian a la Reserva Federal, sino también a los mercados financieros y a millones de hogares que han sufrido el encarecimiento del costo de vida en los últimos años.
Un respiro... pero no una victoria total
Aunque la desaceleración en los precios sugiere que la inflación está bajo control, esto no se puede tomar como un triunfo definitivo. Parte de la moderación se debe a que muchas empresas aún no han trasladado completamente el impacto de los nuevos aranceles a los consumidores. La tregua comercial alcanzada recientemente con China redujo temporalmente los aranceles sobre importaciones clave, pero es solo una pausa.
En los próximos meses, podrían reaparecer presiones inflacionarias si aumentan los costos logísticos o si se agotan los inventarios de productos importados antes de las tarifas.
El dólar cae, las acciones suben, y los bonos se fortalecen
El mercado reaccionó con optimismo moderado. El dólar cayó 0.3% frente a una cesta de divisas, mientras que los rendimientos de los bonos del Tesoro bajaron, impulsando el precio de los títulos de deuda. Las acciones abrieron al alza, con el S&P 500 mostrando avances gracias a la expectativa de que la Reserva Federal tenga más espacio para bajar las tasas de interés este año.
Las cifras alimentan las apuestas de que el banco central podría recortar los tipos en dos ocasiones durante 2025, una perspectiva que alienta especialmente a sectores como la tecnología y el consumo, muy sensibles al costo del dinero.
Los consumidores ajustan el cinturón
El reporte también muestra señales de que los consumidores están empezando a ajustar sus hábitos. Caídas en precios de pasajes aéreos, hoteles y actividades recreativas indican una moderación en el gasto en ocio. En contraste, se registraron aumentos importantes en productos para el hogar y seguros de autos, sectores que podrían estar empezando a reflejar los efectos de los aranceles.
¿Qué oportunidades se abren para los inversionistas?
- Acciones: Las empresas de tecnología, bienes de consumo y bienes raíces podrían beneficiarse si las tasas bajan.
- Bonos del Tesoro: Con la expectativa de recortes de tasas, los bonos de mediano y largo plazo ganan atractivo.
- Oro: La caída del dólar y la búsqueda de seguridad impulsan al metal precioso, que podría superar los USD$2,320 en el corto plazo.
- Divisas emergentes: Monedas como el peso mexicano o el real brasileño se ven favorecidas frente a un dólar más débil.
A pesar del optimismo actual, es recomendable no bajar la guardia. El impacto total de los aranceles aún no se ha sentido por completo, y un repunte inesperado de la inflación en los próximos meses podría cambiar el tono de la Reserva Federal y frenar el rally de los mercados.
En conclusión, el informe de inflación de abril trajo buenas noticias: los precios suben menos de lo previsto, y la presión sobre la Reserva Federal disminuye. Pero el entorno global sigue siendo complejo. Para los inversores, este es un momento para aprovechar las oportunidades, pero con disciplina y visión estratégica. La historia de la inflación aún no ha terminado.