El Gobernador de la Fed alertó sobre una mayor inflación y un menor crecimiento económico
Según Michael Barr, la política monetaria se encuentra "bien posicionada para adaptarse a medida que cambian las condiciones".
Por Gonzalo Andrés Castillo
Redactor especialista en finanzas y mercado de capitales
Michael Barr, actual gobernador de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), indicó que las políticas comerciales impuestas por el presidente Donald Trump probablemente elevarán la inflación. Además, la guerra de aranceles podría reducir el crecimiento económico y aumentar el desempeño para finales de este mismo año.
"La magnitud y el alcance de los recientes aumentos arancelarios no tienen precedentes modernos, desconocemos su forma definitiva y es demasiado pronto para saber cómo afectarán a la economía", declaró Barr el viernes en un diálogo preparado para su entrega al Banco Central de Islandia.
"En mi opinión, el aumento de los aranceles podría provocar disrupciones en las cadenas de suministro globales y generar una presión alcista persistente sobre la inflación", sostuvo el funcionario.
Bajo su punto de vista, las empresas tardarán un tiempo en redireccionar sus redes de distribución. A su vez, algunos proveedores, principalmente las pequeñas empresas, podrían no adaptarse con la suficiente rapidez y quebrar, lo que impactaría aún más en la cadena de suministro.
"Me preocupa igualmente que los aranceles provoquen un mayor desempleo a medida que la economía se desacelera", señaló Barr. "Por lo tanto, la Reserva Federal podría encontrarse en una situación difícil si observamos un aumento tanto de la inflación como del desempleo", agregó.
Las declaraciones de Barr coincidieron en gran medida con las recomendaciones del presidente de la Fed, Jerome Powell, formuladas el miércoles, luego de que el banco central decidiera mantener sin cambios los costos de endeudamiento a corto plazo y adoptara un enfoque de cautela respecto a futuras decisiones sobre las tasas de interés.
Según Barr, la política monetaria se encuentra "bien posicionada para adaptarse a medida que cambian las condiciones", en vista de la solidez de la economía y del mercado laboral antes del anuncio de aranceles radicales por parte de Trump el pasado 2 de abril.