El Gobierno modifica nuevamente el negocio de servicios de rampa en aeropuertos
Se aprobó una nueva normativa que permite a todos los operadores de rampas acceder a espacios en aeropuertos, eliminando la exclusividad que tenía Intercargo y promoviendo mayor competencia en el sector.
El Gobierno implementó una nueva regulación que modifica el funcionamiento del negocio de servicios de rampa en los aeropuertos del país, con el objetivo de fomentar la competencia y mejorar la calidad operativa. Esta medida implica que los explotadores aeroportuarios deberán asignar espacios a todos los operadores de rampas que tengan contratos vigentes con aerolíneas, eliminando la exclusividad que mantenía la estatal Intercargo durante décadas.
Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación, explicó que “a partir de hoy, cualquier empresa que preste servicios de rampa, puede operar en cualquier aeropuerto del Sistema Nacional de Aeropuertos (SNA). Quien tenga clientes en un aeropuerto tendrá un espacio asignado en el mismo para la ejecución de sus operaciones, de esta manera nos aseguramos una efectiva provisión y competencia en la oferta de los servicios”. La nueva versión del reglamento para Prestadores de Servicio de Rampa (PSR), emitida por el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA), deroga la normativa anterior de noviembre y establece que los explotadores aeroportuarios deben garantizar condiciones de competencia, prohibiendo la concesión de exclusividades a cualquier compañía.
En situaciones donde el espacio físico sea limitado, los explotadores deberán resolver las solicitudes considerando criterios como la cantidad de contratos que tenga el operador y la calidad del servicio que presta. Además, las asignaciones deben ser justificadas ante el ORSNA y la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), asegurando que todos los espacios disponibles se encuentren abiertos a las empresas de rampas.
Actualmente, cerca de una decena de operadoras de rampas han sido autorizadas por la ANAC, lo que implica una mayor competencia en el sector y potencial mejora en las operaciones aeroportuarias. Sin embargo, algunas de estas empresas han demorado el inicio efectivo de sus servicios, mientras que algunas aerolíneas han comenzado a operar sus propias rampas, derecho que también fue preservado en la nueva normativa.
Esta intervención del Gobierno responde a la política de “Cielos Abiertos” y a la apertura del mercado aerocomercial, así como a la posible privatización de Intercargo, entidad que hasta ahora mantuvo la exclusividad del servicio de rampas en el país durante décadas. La medida busca mejorar la eficiencia y reducir costos para las aerolíneas, beneficiando a los pasajeros con mejores servicios y mayor oferta. Se espera que la competencia impulse innovaciones y eleve los estándares en la atención en pista.
