Los fondos provinciales crecieron 3,5% en primer semestre pero siguen por debajo de 2023
Los gobernadores buscarán aprobar cambios en el impuesto a los combustibles y activar el giro automático de ATN para aumentar recursos, mientras el Gobierno advierte sobre riesgos para el equilibrio fiscal.
Durante el primer semestre de 2025, las transferencias automáticas a las provincias aumentaron un 3,5% en términos reales, aunque permanecen entre los niveles más bajos de los últimos años. Este jueves, los gobernadores intentarán aprobar leyes para captar un mayor porcentaje de los fondos provenientes del Impuesto a los Combustibles y de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), en busca de fortalecer sus recursos.
Desde el Gobierno nacional, encabezado por Javier Milei, advierten que estas iniciativas podrían poner en riesgo el equilibrio fiscal. Milei señaló que “lo que vos sí tenés es a la casta política tratando de hacer daño, pegándole al riesgo país y eso te genera volatilidad en el tipo de cambio”, en referencia a la reciente suba del dólar.
Según informes de Politikon Chaco e IARAF, las transferencias automáticas, que incluyen coparticipación federal, leyes complementarias y compensaciones, llegaron a $28,527 billones en el primer semestre, lo que representa un aumento nominal del 57,6%. Sin embargo, al descontar la inflación, el crecimiento real se limita al 3,5%.
La desaceleración en las transferencias por coparticipación se atribuye a la caída en la recaudación de impuestos clave, como el Impuesto a las Ganancias, que registró una baja del 20% real interanual. Por otro lado, el IVA mostró un incremento real del 6,7%, mientras que impuestos complementarios como Bienes Personales aumentaron, ayudando a mitigar parcialmente el impacto negativo.
A pesar del crecimiento, los recursos transferidos no alcanzan los niveles previos a la crisis económica, permaneciendo por debajo de los valores de 2023, 2022 y 2021. Las provincias enfrentan así una asignación insuficiente para cubrir los crecientes costos derivados de la inflación y las demandas sociales.
Los gobernadores confían en reunir los votos necesarios para tratar este jueves en el Senado las propuestas que modifican la distribución del Impuesto a los Combustibles y activan el giro automático de los ATN, tras semanas de negociaciones y un ausentismo colectivo en un acto convocado por el presidente Milei. También podrían debatirse aumentos en el financiamiento universitario y en las jubilaciones, lo que impactaría en el gasto público.
El Ejecutivo ya anunció que, de aprobarse estas leyes, recurrirá al veto. La Casa Rosada rechazó especialmente la reforma del artículo 19 de la Ley 23.966, que regula la distribución del Impuesto a los Combustibles Líquidos. Actualmente, las provincias reciben solo el 10,40% de lo recaudado, mientras que la mayoría de los fondos se destina al Tesoro Nacional, al Fondo Nacional de Vivienda (FONAVI), al Sistema Único de Seguridad Social y a otros fideicomisos.
Los mandatarios provinciales proponen que el 58,36% de los fondos de ese impuesto se transfiera directamente a las jurisdicciones, con el fin de fortalecer su autonomía fiscal y aliviar sus cuentas, que están bajo fuerte presión por compromisos financieros y sociales. Esta medida implicaría reducir los recursos disponibles para el Gobierno Nacional, poniendo en tensión el equilibrio fiscal que busca preservar la administración de Milei.
Además, los gobernadores insisten en activar el mecanismo de giro automático de los ATN, un fondo creado por ley pero cuya distribución ha sido discrecional. Entre 2017 y 2024, los ATN acumularon $4,3 billones sin ejecutarse. Reclaman eliminar los fondos fiduciarios y que el remanente se distribuya directamente a las 24 provincias.
El oficialismo insiste en que cualquier modificación debe garantizar la estabilidad macroeconómica. Mientras tanto, provincias advierten que sin mayor financiamiento, la prestación de servicios esenciales podría verse comprometida en los próximos meses.