Inversores globales inyectan millones en fondos de acciones y bonos

La última semana atrajo una gran marea de entusiasmo inversor, sustentada en el próximo recorte de tasas de interés por parte de la FED.

Por Eric Nesich

Periodista especializado en Economía y Finanzas

Viernes 23 de agosto del 2024 a las 3:00 pm


La semana previa al 21 de agosto trajo consigo una ola de entusiasmo en los mercados globales, en gran parte impulsada por las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos recortará las tasas de interés en su próxima reunión de septiembre. Los inversores, atentos a cualquier señal de la Fed, comenzaron a mover grandes sumas de dinero hacia fondos de acciones, generando el mayor flujo neto en más de un mes.

 

Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, sugirió durante el Simposio Económico de Jackson Hole que la inflación está bajo control, y que la economía de EE.UU. muestra signos de solidez, lo que abre la puerta a una posible reducción en las tasas de interés. Aunque Powell no especificó cuándo ni cuánto se recortarán, los mercados ya anticipan un ajuste modesto en las tasas, que podría generar un mayor impulso en los mercados financieros.

 

Según datos de LSEG, los inversores globales invirtieron 15.730 millones de dólares en fondos de acciones durante la semana, lo que representa la mayor compra neta desde el 17 de julio. Este movimiento refleja un optimismo renovado sobre la economía estadounidense, apoyado por sólidos datos de ventas minoristas y confianza del consumidor, así como una lectura benigna de la inflación.

 

Las expectativas de recortes de tasas aumentaron luego de que las actas de la última reunión de la Fed revelaran que la mayoría de los responsables políticos apoyan esta medida si los datos económicos continúan alineándose con las expectativas. En este contexto, los fondos de renta variable estadounidenses recibieron 5.970 millones de dólares, la mayor cantidad en cinco semanas, mientras que los fondos europeos y asiáticos también captaron 5.550 millones y 4.390 millones de dólares, respectivamente.

 

Los sectores tecnológicos y de bienes de consumo básicos lideraron las entradas, con 931 millones y 825 millones de dólares, mientras que los servicios públicos experimentaron salidas significativas de 612 millones de dólares. Además, los fondos de bonos mantuvieron su popularidad, con una entrada neta de 11.290 millones de dólares, impulsada por compras en bonos corporativos y gubernamentales.

 

 

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