A pesar de la crisis bancaria, BlackRock proyecta más aumentos de tasas
La gestora de fondos explicó que el actual entorno es muy diferente al de 2008, cuando la política monetaria se enfocó en impulsar la economía.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Redactor especialista en finanzas y mercado de capitales
En solo una semana, el panorama financiero cambió por completo, ya que la quiebra de Silicon Valley Bank desestabilizó el ecosistema bancario y generó que los inversores y las entidades gubernamentales entren en pánico. No obstante, incluso en este escenario, la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) seguirá aumentando las tasas de interés.
Así lo cree el Instituto de Inversiones de BlackRock, la gestora de fondos más grande del mundo, cuyos analistas indicaron que, aunque la tensión en el sector bancario está atentando contra la confianza de los inversores y endureciendo las condiciones financieras, el banco central deberá seguir combatiendo la inflación.
"No vemos que estos desarrollos permitan a la Fed detener su campaña de aumento de tasas; este es un entorno muy diferente al de 2008, cuando todas las palancas de política monetaria se utilizaron para apoyar la economía", escribieron el lunes los especialistas de BlackRock. "En cambio, al reforzar el sistema bancario, la Fed puede enfocar la política monetaria en reducir la inflación a su objetivo del 2%", agregaron.
La compañía financiera señaló que el colapso de Silicon Valley Bank es un claro ejemplo de "grietas financieras" que se han producido debido a la campaña de aumento de tasas más rápida desde la década de 1980. Este suceso tendrá efectos en cadena para la economía, lo que incluirá condiciones financieras más rigurosas y una oferta de crédito más limitada, especialmente en el sector tecnológico.
De todas maneras, agregó que los activos en el centro de los problemas bancarios, los bonos del Tesoro, están entre los más líquidos y transparentes del sistema, lo que aumentará la eficacia de las medidas del Gobierno para evitar una catástrofe mayor.
La recomendación de BlackRock es que los inversores den preferencia a los bonos del gobierno a corto plazo como una fuente de ingresos, debido a que la caída reciente en los rendimientos podría ser temporal y revertirse en el futuro ante la presión de la Fed por aumentar las tasas.