Massa anunció que le pagará al FMI los vencimientos de octubre luego de las elecciones
Parte del swap de divisas con China por 6500 millones de dólares será utilizado para afrontar los vencimientos de este mes con el Fondo Monetario Internacional
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Argentina le pagará al Fondo Monetario Internacional (FMI) los vencimientos de octubre con los fondos conseguidos del swap de 6500 millones de dólares con China, el monto asciende a 2600 millones de dólares.
No es la primera vez que el Gobierno utiliza los yuanes de libre disponibilidad con China para afrontar las deudas contraídas con el FMI, dado que ya había realizado un pago a través de este mecanismo meses atrás
"Es de interés para el FMI seguir trabajando con la Argentina con un consenso tan amplio como sea posible para garantizar la estabilidad y la prosperidad del país", declaró la vocera del organismo multilateral, Julie Kozack, durante su última aparición con la prensa en la que se refirió a Argentina a fines de septiembre. Cabe recordar que el 23 de agosto, el país recibió un desembolso de 7500 millones de dólares por parte del organismo monetario.
El giro fue otorgado a pesar de que "los principales objetivos del programa no se alcanzaron, como consecuencia de la sequía sin precedentes y desviaciones de las políticas", según palabras del FMI en un comunicado de prensa.
Para el ministro de Economía, Sergio Massa, "Agosto ha sido uno de los peores meses en el proceso económico de los últimos 30 años, producto de una imposición del FMI que de alguna manera golpea enormemente nuestra economía, que es la imposición de la devaluación más el impuesto PAIS como mecanismo de garantía que pretende el Fondo para su cobro, su percepción", manifestó en una oportunidad.
A su vez, durante el mes de septiembre, Massa dijo se le va a "pagar" al Fondo Monetario Internacional "para que se vaya de Argentina y nos dejen decidir de manera soberana".
Luego de las elecciones presidenciales de este domingo se abrirá una nueva etapa en la que se podrá inferir en que situación se encuentra la economía del país a futuro, teniendo en cuenta los resultados electorales que definirán quien comandará los destinos del país los próximos cuatro años.