La economía volvió a subir en octubre y ya suma un 5,8% en lo que va del año
Según el último informe de Orlando Ferreres, la actividad volvió a moverse con fuerza en octubre: subió 0,7% mensual y mostró mejoras en la mayoría de los sectores. El impulso vino de la intermediación financiera, el agro y la minería, que siguen siendo los motores del repunte.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
La economía argentina volvió a sorprender en octubre con un avance más sólido de lo previsto. Según el Índice General de Actividad (IGA) de Orlando J. Ferreres & Asociados, el nivel general subió 0,7% respecto de septiembre, después de la revisión al alza del mes anterior, marcando un cambio de clima claro en comparación con los meses más flojos del año.
En la comparación interanual, la mejora fue del 4,6% contra octubre de 2024. Y si se mira el acumulado entre enero y octubre, la suba llega al 5,8%, un número que no pasa desapercibido en medio de un proceso de reordenamiento económico. Para la consultora, el IGA —que toma 122 series estadísticas y suele anticipar el comportamiento del PBI— muestra “un panorama más favorable de lo que se esperaba”.
El repunte no fue cosa de un solo rubro. Al contrario: tres sectores de peso explicaron buena parte del avance. Primero, la intermediación financiera, que volvió a destacarse con un crecimiento interanual del 31%, ubicándose como el segmento más dinámico del mes. En segundo lugar, el agro cortó una racha de seis meses en baja y creció 4,8%, impulsado por el salto del 12,3% en el sector agrícola, aunque la ganadería retrocedió 2,4%. Y la minería sumó otro mes positivo: subió 3,9% interanual y ya acumula 56 meses seguidos en alza. Dentro del sector, la producción de petróleo se incrementó 13,5%, mientras que el gas natural cedió 7%.
Entre enero y octubre, minas y canteras avanzaron 7,4%, consolidándose como uno de los pilares más firmes del esquema productivo, sobre todo por el empuje energético. La industria manufacturera, en cambio, todavía muestra un avance más moderado. En octubre creció 0,9% contra septiembre, pero quedó 1,9% por debajo de diciembre de 2024 en la medición desestacionalizada. En la comparación anual cayó 1,1%, aunque el acumulado mantiene un leve crecimiento del 2%.
La rama de electricidad, gas y agua también mostró un leve alivio: subió 1,8% interanual en octubre y achicó la caída acumulada a 1,5%. La generación eléctrica retrocedió apenas 0,2% por una menor demanda de los hogares, según datos de CAMMESA. En paralelo, la construcción avanzó 4% interanual, el comercio mayorista y minorista sumó 2,7%, las actividades inmobiliarias y empresariales crecieron 2,6%, y transporte y comunicaciones quedó con un modesto 1,2% positivo.
Más allá de los matices sectoriales, en los despachos oficiales y privados leen estos números como una señal de que la economía empieza a encontrar algo de estabilidad luego de un año de fuertes correcciones. Falta aún que la mejora se traslade con mayor claridad al consumo y al empleo, pero el dato de octubre suma un elemento clave: la recuperación ya no luce aislada ni frágil.
Con noviembre en marcha y a la espera de los cierres de fin de año, la mirada estará puesta en si esta tendencia se sostiene o si fue un “veranito” estadístico. Por ahora, los semáforos de actividad siguen en verde y marcan que el rebote, lento pero constante, continúa su marcha.
