OPEP+ cumple solo el 75% de sus metas de producción y mantiene la tensión en los precios del crudo
La alianza petrolera que integra Rusia y Arabia Saudí entre otros, no ha logrado llegar a la meta propuesta de producción que estableció a principios de año.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
La alianza OPEP+ ha logrado suministrar apenas tres cuartas partes del incremento de producción que había proyectado desde abril, y las estimaciones indican que la cifra podría caer a la mitad hacia fin de año debido a las limitaciones de capacidad que enfrentan varios de sus miembros. Así lo señalaron fuentes del sector y analistas consultados, con datos que muestran un desfase de alrededor de 500.000 barriles diarios respecto de los objetivos planteados.
El grupo, que integra a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y a aliados como Rusia, representa cerca del 50% de la producción mundial de petróleo. Desde abril, comenzó un proceso gradual de desarme de los recortes voluntarios implementados en 2023 para sostener los precios internacionales. Sin embargo, la realidad productiva se quedó corta frente a las metas: entre abril y agosto, OPEP+ sólo concretó un 75% del incremento previsto, quedando por debajo de los 1,92 millones de barriles diarios estipulados para ese período.
Este desvío ha resultado clave para sostener los precios del crudo Brent, que cotiza cerca de un máximo de siete semanas en torno a 69 dólares por barril, a contramano de las previsiones que anticipaban un exceso de oferta. Analistas de Barclays y Kpler coinciden en que las restricciones operativas de los productores han contribuido a mantener firme el mercado, incluso en medio de señales de desaceleración global.
Según la Agencia Internacional de Energía (AIE), la capacidad excedente de OPEP+ asciende a 4,1 millones de barriles diarios, aunque casi toda concentrada en Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos. La mayoría de los demás países se encuentra operando al límite, lo que reduce los márgenes de maniobra ante posibles disrupciones por conflictos o desastres naturales.
Para septiembre y octubre, el grupo planea nuevos aumentos de producción –547.000 barriles diarios y 137.000, respectivamente–, pero los analistas estiman que la ejecución real podría alcanzar apenas la mitad. Esto mantendría la percepción de un mercado ajustado, con pocos colchones de oferta para absorber shocks.
El desequilibrio entre las metas y la realidad productiva tiene implicancias directas para los precios internacionales: el diferencial entre los contratos inmediatos y los futuros a seis meses se amplió a 2,39 dólares, el mayor desde agosto, señalando que los operadores perciben una escasez de oferta en el corto plazo.
De cara a los próximos meses, se prevé que OPEP+ mantenga su estrategia de ajustes graduales, pero con dificultades estructurales para alcanzar los niveles prometidos. Según proyecciones de Barclays, la capacidad ociosa del grupo podría caer a 2 millones de barriles diarios para 2026, acentuando la presión sobre los precios si la demanda global se mantiene estable o repunta.