Tesla pierde terreno en Europa: caída de ventas y el fantasma de la competencia china
Las ventas del fabricante estadounidense se desplomaron en agosto en varios mercados europeos clave, mientras BYD y otros rivales pisan fuerte. La política y las decisiones de Elon Musk también generan ruido en la marca.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Tesla atraviesa un momento delicado en Europa. En agosto, las ventas de la automotriz eléctrica cayeron de manera abrupta en mercados clave como Francia, Suecia, Dinamarca y Países Bajos, reflejando no solo la feroz competencia de los nuevos jugadores chinos sino también el desgaste de una oferta de modelos que se quedó sin grandes novedades en los últimos años.
En Francia, por ejemplo, las matriculaciones bajaron un 47,3% frente a agosto de 2024, en un contexto donde el mercado automotor general creció 2,2%. El contraste fue aún más duro en Suecia, donde las ventas de Tesla se desplomaron 84% mientras las de autos eléctricos en general se mantuvieron estables y el mercado creció 6%. En Dinamarca la baja fue del 42% y en Países Bajos, del 50%.
No todo fueron malas noticias: en Noruega, un mercado históricamente fiel a Tesla, las ventas crecieron 21,3%. Sin embargo, el verdadero salto lo pegó BYD, que multiplicó sus registros por más de tres, con un avance del 218%. España también dio aire: allí las matriculaciones de Tesla treparon 161%, impulsadas por subsidios estatales de hasta 7.000 euros. Aun así, los números se vieron opacados por la performance del rival chino, que vendió un 400% más y superó en volumen a la marca de Musk.
Con todo, especialistas como Andy Leyland (SC Insights) advirtieron que los datos españoles podrían estar inflados por la llegada de un cargamento puntual en agosto y que habrá que esperar los números trimestrales para tener un panorama más realista.
A esto se suma un factor político que ya impacta en el consumo: Musk financió la campaña de Donald Trump en EE.UU. y se mostró cercano a partidos de ultraderecha en Europa. Eso generó rechazo en buena parte de la clientela. Según la consultora Electrifying.com, más de la mitad de los encuestados dijo que la figura del empresario los desalienta a comprar un Tesla.
La estrategia de Tesla de bajar fuerte los precios desde 2023 golpeó de lleno el valor de reventa de sus autos. El mercado de usados se llenó de Teslas baratos, lo que desalienta nuevas compras. En Reino Unido, las ventas de usados de la marca treparon 270% en julio y el precio promedio del Model Y cayó 41% en un año, según datos de Marketcheck.
La empresa confía en que el Model Y renovado pueda recomponer la tendencia, pero los números de agosto en países como Suecia y Dinamarca, donde ese modelo cayó hasta 87%, siembran dudas.
Tesla sigue siendo un jugador central en la movilidad eléctrica, pero en Europa enfrenta un cóctel complicado: rivales más dinámicos, precios de usados en caída libre y un líder cuyo posicionamiento político divide aguas. El concurso por dominar el mercado eléctrico ya no tiene un claro favorito.