Yerba Mate: el Gobierno elimina límites para su plantación
El Instituto Nacional de Yerba Mate dió de baja la normativa que limitaba las hectáreas de nuevas plantaciones. Con esta medida, los productores de yerba mate podrán plantar sin restricciones, impulsando así la producción del sector.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Con la derogación de una vieja resolución, ya no hay límites de hectáreas por año ni trabas para replantar yerba mate. El cambio se alinea con la política de desregulación total impulsada por el Gobierno nacional.
A partir de ahora los yerbateros tienen vía libre para plantar sin mirar el contador de hectáreas. El Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) tiró abajo una resolución que les ponía un tope de 5 hectáreas por año a los productores. La nueva norma, la 42/2025, salió en el Boletín Oficial y básicamente les dice: “muchachos, planten todo lo que quieran”.
Antes, con la Resolución 170/2021, se trataba de cuidar el mercado y bancar un poco más a los productores chicos, evitando que los grandes acaparen todo. También se regulaba cuánta superficie se podía replantar, o cuántas plantas secas se podían reponer sin tocar la densidad original. Bueno, todo eso ya no existe más.
De hecho, esa regulación anterior ya venía en franca decadencia, porque hacía rato que se había dejado de controlar o fiscalizar, y la Resolución 152/2021 —que era la que le daba sustento— también fue dada de baja.
Federico Sturzenegger, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, festejó la decisión en su cuenta de X (ex Twitter) diciendo que el INYM “termina con las restricciones al crecimiento del sector”, cerrando lo que habían empezado con el DNU.
Criticas desde Misiones
Desde el portal misionero Primera Edición sostienen que con esta medida "las grandes empresas podrán avanzar con plantaciones masivas sin ningún tipo de restricción”.
“Lo que para algunos representa una ‘liberación del mercado’, para la mayoría de los productores del interior misionero significa una amenaza directa a su subsistencia”, remarcaron.
Para el portal, el anterior límite de 5 hectáreas (a partir de hoy derogado) solamente buscaba que no sucedan “los ciclos nocivos de sobreproducción, caída de precios y abandono de chacras, que históricamente han afectado con más dureza a los pequeños y medianos productores”.
A partir de hoy cada productor puede plantar la yerba que quiera, sin pedirle permiso a nadie. Para algunos es una buena, porque libera el trabajo y permite crecer. Para otros, puede ser una jugada arriesgada que termine beneficiando a los grandes jugadores y dejando en offside a los más chicos.