Aerolíneas Argentinas: el Gobierno evalúa intervenir la empresa y habrá despidos
La respuesta desde la Casa Rosada será contundente luego de otro paro salvaje en Aeroparque, donde empleados dejaron varados y encerrados a cientos de pasajeros.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
El Gobierno está viendo la chance de activar un "procedimiento preventivo de crisis" en Aerolíneas Argentinas, que básicamente es una movida que le permitiría suspender o echar empleados, con el Ministerio de Trabajo mediando. Esta medida llegó en un día bastante agitado: por un lado, los pilotos de APLA frenaron el paro que venían haciendo en los simuladores de vuelo; por otro, los de APA-Intercargo armaron una “asamblea informativa” y dejaron a cientos de pasajeros atrapados dentro de los aviones en Aeroparque durante varias horas.
Parece que la decisión de avanzar con esta medida fue comunicada a Fabián Lombardo, el director de Aerolíneas, por Santiago Caputo, asesor presidencial.
A media mañana, los de APA empezaron una seguidilla de “asambleas informativas” en Intercargo, la empresa que maneja el servicio de rampas en Aeroparque, y eso hizo que varios vuelos de otras aerolíneas quedaran cancelados. Para colmo, los pasajeros que ya habían aterrizado no pudieron bajar del avión y estuvieron un buen rato encerrados ahí. Finalmente, tuvieron que ser asistidos por la Policía Aeroportuaria y otros empleados de la empresa. Esta situación llevó a que Intercargo metiera una denuncia penal contra APA, cuyo líder es Edgardo Llano.
A la tarde, después de una reunión larga en la sede de APLA, el gremio de pilotos, encabezado por Pablo Biró, decidió suspender el paro “de manera provisoria” para mostrar “buena voluntad” y seguir negociando con el Gobierno. Los pilotos vienen reclamando un aumento de sueldo desde mayo, y otros gremios, como APA y los tripulantes de a bordo, también están presionando, mientras que los técnicos aeronáuticos de APTA y el personal superior de UPSA ya cerraron un aumento del 11,8% para los meses de junio a agosto.
En los últimos meses, APLA había llevado el conflicto a los simuladores de Ezeiza, lo que hizo que muchos pilotos perdieran su turno para renovar la licencia y se quedaran inhabilitados. Además, sacaron una orden para que no se reprogramen pilotos con licencia vencida, dejando a la empresa sin posibilidad de reemplazarlos.
En medio de este conflicto, Ricardo Cirielli, que es el jefe de los técnicos aeronáuticos, salió a criticar a APLA, llamándolos “topos” que quieren perjudicar a Aerolíneas. Mientras tanto, Lombardo les pidió a los gremios que presenten una “propuesta seria” que permita mantener a la compañía a flote.
Desde la Casa Rosada sostienen que los sindicatos tienen hasta el viernes para presentar una propuesta que permita operar sin más conflictos. De no ser así, se activaría el procedimiento preventivo de crisis, que podría implicar despidos o suspensiones.
Este procedimiento está en la Ley de Empleo (24.013) y fue pensado para empresas que se ven en problemas de trabajo. Si se da luz verde, Aerolíneas podría suspender o echar gente, aunque todo el proceso lo maneja el Ministerio de Trabajo. Aunque Aerolíneas es del Estado, funciona como una sociedad anónima desde que fue privatizada en los ‘90, lo que le da margen para acceder a esta herramienta.