Otro movimiento en el Gobierno: Daniel Tillard deja el Banco Nación y asume Darío Wasserman

Tras la salida de Juan Pazo de ARCA, el Presidente prepara un nuevo recambio clave. Daniel Tillard se va del Nación y lo reemplaza Darío Wasserman, un dirigente cercano a Karina Milei y con peso propio en el armado libertario.

Por Eric Nesich

Periodista especializado en Economía y Finanzas

Hace 0 horas

El Gobierno sigue ajustando piezas en el tablero. A la salida de Juan Pazo de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) se suma ahora otro cambio de peso: Daniel Tillard deja la presidencia del Banco Nación y será reemplazado por Darío Wasserman, hasta ahora vicepresidente de la entidad y hombre de máxima confianza de Karina Milei.

 

Tillard, economista cordobés y ex titular de Bancor, había desembarcado en la gestión de la mano de Guillermo Francos. En las últimas horas presentó su renuncia y, en privado, definió su paso por el Nación como una “etapa cumplida”. Su salida se explica, en buena medida, por la pérdida de respaldo político dentro de la Casa Rosada tras el corrimiento de Francos de la Jefatura de Gabinete.

 

Minutos antes de las 14, el Ministerio de Economía confirmó oficialmente el cambio. Luis “Toto” Caputo destacó la gestión saliente, con números sobre la mesa: durante el mandato de Tillard se otorgaron cerca de 20 mil créditos hipotecarios y el Banco Nación amplió su participación en el mercado. El ahora ex presidente agradeció la confianza y se despidió sin estridencias.

 

Tillard era uno de los últimos funcionarios ligados a Francos que seguían en pie dentro del esquema de Javier Milei. De aquel grupo inicial, hoy el único que permanece es Daniel Scioli, al frente de la Secretaría de Turismo y Ambiente.

 

Su reemplazante será Darío Wasserman, actual vice del Nación. La relación entre ambos era correcta, pero Wasserman contaba con una carta decisiva: su cercanía con los hermanos Milei, y en especial con Karina, secretaria general de la Presidencia y figura central del poder libertario.

De perfil bajo, desarrollador inmobiliario y con pasado de vínculos en Pro, Wasserman es además esposo de Pilar Ramírez, jefa del bloque de La Libertad Avanza en la Legislatura porteña y una de las principales armadoras de Karina Milei en la Ciudad. Aunque evita la exposición, tiene influencia directa en decisiones clave del espacio y mantiene lazos estrechos con los Menem, parte del círculo íntimo de la hermana del Presidente.

 

Desde diciembre de 2023 a esta parte, la lista de salidas es extensa. Según relevamientos privados, ya se produjeron alrededor de 200 desplazamientos de funcionarios de alto rango. Los últimos fueron el cambio en la SIDE y la salida de Pazo de ARCA, reemplazado por Andrés Vázquez, otro dirigente del riñón de Caputo.

 

Con estos movimientos, el Gobierno deja en claro que la etapa de transición quedó atrás. La Casa Rosada entra en una fase de mayor control interno, con menos equilibrios y más poder concentrado en el círculo más cercano al Presidente.

 

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