El oro ya acumula una baja del 13% y comienza a preocupar a los inversores
En lo que va del año, el metal precioso acumula una suba de solo el 0,4%, aproximadamente.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Desde el último máximo relativo alcanzado en marzo de este año hasta la actualidad, el oro acumula una baja de casi el 13%. Como resultado, en lo que va del año, el metal precioso solo creció un 0,4%, aproximadamente. Interanualmente, la cifra apenas supera el 2,1%.
En condiciones macroeconómicas normales, la actual estabilidad sería muy preciada por los inversores. Sin embargo, la inflación se encuentra en niveles no vistos en más de cuatro décadas, en términos internacionales. Por ejemplo, en Estados Unidos, alcanzó el 8,6% interanual en mayo.
En otras palabras, el oro no está actuando como refugio de valor, ya que no está logrando mantener el poder adquisitivo de los ahorristas.
Entre los motivos de este comportamiento casi lateral se destacan la suba de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) y el fortalecimiento del dólar. En esta línea, Fawad Razaqzada, analista de mercados en City Index, comentó que un "dólar estadounidense fuerte y las expectativas de aumento de las tasas de interés continúan pesando sobre el metal precioso, y el metal una vez más no puede beneficiarse de la aversión al riesgo en curso en los mercados".
Cuando el miedo y la incertidumbre llegan a la bolsa, los inversores evitan los activos de riesgo como las acciones y migran hacia los más conservadores y seguros, como el oro. El problema es que, si el metal no crece lo suficiente para hacerle frente a la inflación, ¿cómo se protege el patrimonio?
De todas formas, a pesar de lo que está sucediendo actualmente, algunos grandes participantes de Wall Street siguen confiando en el commodity para el resto del año, como Wells Fargo.
En concreto, el jefe de estrategia John LaForge informó: "Todavía nos gusta el oro y mantenemos nuestro rango de precio objetivo para fin de año de 2022 de USD 2.000 / 2.100 por onza". Actualmente, el oro cotiza a poco más de USD 1.808 por onza, por lo que el objetivo de Wells Fargo supondría una revalorización de hasta el 16%.
