A pesar de los conflictos bélicos, Citi espera que el oro caiga de precio
En el peor de los casos, la materia prima podría llegar al rango de entre USD 2.500 y USD 2.700 por onza para la segunda mitad de 2026.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Redactor especialista en finanzas y mercado de capitales
El precio del oro se disparó un 29% desde enero hasta un nivel récord de USD 3.380 por onza. Y aunque los inversores creen que la tendencia alcista podría sostenerse por la inestabilidad geopolítica global, los estrategas de Citigroup piensan que existe el riesgo de una baja.
En concreto, proyectaron que el metal dorado caería por debajo de los USD 3.000 para finales de 2025 o principios de 2026 dada la disminución de la demanda de inversión y una mejora en las perspectivas de crecimiento económico mundial.
El banco revisó el objetivo del oro para los próximos tres meses de USD 3.500 por onza a USD 3.300 y el avance para los próximos seis a doce meses de USD 3.000 a USD 2.800.
En su escenario base, se espera que los precios del oro se mantengan consolidándose entre los USD 3.100 y USD 3.500 durante el tercer trimestre, impulsados por los peligros geopolíticos, posibles modificaciones en la política arancelaria de Estados Unidos y las preocupaciones fiscales en ese país, antes de iniciar una tendencia bajista.
"Prevemos que la demanda de inversión en oro disminuirá a finales de 2025 y 2026, ya que, en última instancia, vemos que la popularidad del presidente Trump y el impulso al crecimiento de Estados Unidos comienzan a cobrar fuerza, especialmente a medida que las elecciones intermedias cobran protagonismo", dijo Citi en una nota publicada para sus clientes.
A diferencia de su visión cautelosa sobre el oro, Citi proyectó que los precios de la plata subirán hasta USD 40 por onza en los próximos seis a doce meses, impulsados por una menor disponibilidad del metal y una demanda sólida.
En un escenario optimista, la plata podría alcanzar los USD 46 en el tercer trimestre de 2025, favorecida por una resolución más rápida del conflicto comercial entre Estados Unidos y China, así como por una política monetaria más agresiva por parte de la Reserva Federal, añadió el banco.