Ford estima que perderá 1500 millones de dólares por culpa de los aranceles de Trump
La automotriz enfrenta subas millonarias en costos, dudas sobre el futuro de sus eléctricos y un contexto internacional muy complicado gracias a Donald Trump y sus políticas.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Ford Motor Company (F) metió un volantazo inesperado: frenó su pronóstico anual por completo. ¿El motivo? La incertidumbre que generó el nuevo paquete de aranceles del presidente norteamericano Donald Trump. Según cálculos de la empresa, esta jugada les podría costar unos 1.500 millones de dólares en ganancias ajustadas antes de intereses e impuestos.
“Todavía no sabemos bien cómo van a responder nuestros competidores a todo esto, pero está claro que quienes fabriquen más dentro de EE. UU. van a tener ventaja”, dijo Jim Farley, el CEO de Ford, durante una charla con analistas.
El anuncio cayó después del cierre del mercado y, como era de esperarse, las acciones bajaron un 2,3% en las operaciones posteriores. Los aranceles, sobre todo los que afectan autos traídos de México y China, se estima que le van a sumar 2.500 millones de dólares a los costos del año. Aunque Ford logró recortar cerca de 1.000 millones usando estrategias como mover autos desde México a Canadá para esquivar impuestos, igual la carga es fuerte.
En cuanto a los números del primer trimestre, Ford mostró una baja importante: ganancias netas de 471 millones, contra los 1.300 millones del año anterior. Sin embargo, sorprendieron con ganancias por acción de 14 centavos, bastante por encima de los 2 centavos que esperaba el mercado. Esto se debió, en parte, a mejoras en costos y calidad.
Pero no todo es culpa de Trump. La división de vehículos eléctricos, que parecía ser el futuro brillante de la marca, también está dejando un agujero negro: se esperan pérdidas de hasta 5.500 millones este año. Desde 2023 ya llevan más de 10.000 millones en rojo. Por esto, dieron de baja un megaproyecto de plataforma eléctrica, el FNV4, que venía con demoras y costos que se les fueron de las manos.
Las ventas totales del primer trimestre cayeron un 5%, a 40.700 millones de dólares, pero estuvieron por encima de lo que se esperaba. Muchos consumidores salieron corriendo a comprar autos por miedo a las subas de precios que podrían venir.
Entre la guerra comercial, los eléctricos que no rinden y un mercado que se mueve al ritmo de los anuncios políticos, Ford enfrenta un año más que complicado.