Alemania amenaza con un impuesto del 10% a plataformas como Google y Facebook
La propuesta se presenta en un contexto en el que se anticipa que el canciller Friedrich Merz realice próximamente un viaje a Washington para reunirse con Trump.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Redactor especialista en finanzas y mercado de capitales
La guerra comercial iniciada por el presidente estadounidense Donald Trump llegó rápidamente a una de las potencias más importantes del mundo: Alemania.
La nación europea está considerando un impuesto del 10% a grandes plataformas en línea como Google, de Alphabet, y Facebook, de Meta Platforms, según el nuevo ministro de Cultura, Wolfram Weimer.
La propuesta se presenta en un contexto en el que se anticipa que el canciller Friedrich Merz realice próximamente un viaje a Washington para reunirse con Trump, aunque la reunión aún no fue confirmada oficialmente.
Vale recordar que el republicano americano expresó en ocasiones anteriores su rechazo a que gobiernos extranjeros aprovechen la base imponible de Estados Unidos en beneficio propio.
En este marco, Weimer señaló que su ministerio está trabajando en una iniciativa legislativa mientras mantiene conversaciones con los operadores de plataformas, a quienes acusó de incurrir en una "astuta evasión fiscal", con el objetivo de explorar soluciones alternativas como las contribuciones voluntarias.
"Estas corporaciones generan miles de millones de dólares en negocios en Alemania con márgenes de beneficio altísimos y se benefician enormemente de la producción mediática y cultural del país, así como de su infraestructura, pero apenas pagan impuestos, invierten muy poco y aportan muy poco a la sociedad", declaró a la revista Stern este jueves.
A su vez, Weimer acusó a las grandes plataformas de internet de haber creado "estructuras de carácter monopolístico" que, además de limitar la competencia, concentran en exceso el poder mediático, lo que representa una amenaza para la libertad de expresión.
"Si Google, bajo presión de Donald Trump, cambia unilateralmente el nombre del Golfo de México a Golfo de América —y simplemente lo decreta debido a su enorme poder para moldear el significado de la comunicación global— entonces podemos ver los tipos de problemas que subyacen en las estructuras actuales", aseveró el funcionario alemán.