REM del BCRA: sube la expectativa de inflación y cede la presión sobre el dólar.
El último relevamiento del Banco Central mostró un leve aumento en las estimaciones de inflación para noviembre y diciembre, mientras que las proyecciones del tipo de cambio bajaron respecto al informe previo.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
El Banco Central difundió una nueva edición del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) y dejó un combo de señales mixtas: los analistas corrigieron al alza la inflación del corto plazo, pero al mismo tiempo recortaron las previsiones del dólar para fin de 2025. Entre consultoras, centros de investigación y entidades financieras participaron 46 referentes del sector privado, cuyos pronósticos sirven como termómetro del humor económico del mercado.
Para noviembre, la inflación mensual proyectada quedó en 2,3%, una suba de 0,4 puntos frente al informe previo. El “Top 10”, el grupo con mejor puntería histórica, acompañó ese número y marcó un alza algo menor, de 0,3 puntos. La inflación núcleo —que no incluye precios estacionales ni regulados— también avanzó: quedó en 2,2% tanto para el conjunto de analistas como para el Top 10. De cara a diciembre de 2025, la inflación esperada trepó a 2,1%, apenas un ajuste de 0,1 puntos, y los especialistas prevén que la tendencia siga aflojando hasta rondar el 1,5% mensual hacia mayo de 2026.
En el capítulo de la actividad económica, las señales fueron un poco más optimistas. El REM prevé un crecimiento trimestral del 0,5% para el tercer trimestre de 2025, lo que revierte la caída que venía proyectándose. Para el cuarto trimestre se espera una suba del 0,8% y, para el primer trimestre de 2026, del 0,9%. Con estos datos, el nivel promedio del PIB en 2025 quedaría 4,4% por encima del registrado en 2024.
La tasa de desempleo, en cambio, no mostró sobresaltos: el REM dejó en 7,5% la proyección para el tercer trimestre de 2025 y la ubicó en 7,2% para los últimos tres meses del año. También hubo ajustes en la tasa de interés mayorista (TAMAR) de bancos privados, que se recortó a 32% anual para diciembre, tres puntos menos que en el relevamiento previo. Para diciembre de 2026, el mercado espera que la TAMAR siga en descenso y llegue a 20,9%.
En materia externa, las exportaciones estimadas para 2025 trepan a USD 85.667 millones, casi USD 1.000 millones más que en la encuesta anterior. Las importaciones también subieron, aunque menos: quedaron en USD 77.140 millones, lo que deja un superávit comercial esperado de USD 8.527 millones. Es una mejora de USD 240 millones respecto al REM previo y confirma la expectativa de un saldo positivo más holgado para el próximo año.
El frente fiscal también mostró números robustos. Los analistas proyectan un superávit primario de $12,9 billones para 2025, mientras que el “Top 10” lo ubica en $13,2 billones. Según el informe, ninguna de las estimaciones del mercado imagina un rojo fiscal ni un superávit por debajo de los $10 billones, una señal de que el ajuste fiscal encarado este año seguiría firme en el tiempo.
Con este REM, el mercado dejó ver un panorama que combina prudencia y cierta estabilidad hacia adelante: una inflación que todavía muestra resistencia en el muy corto plazo, un dólar cuya expectativa de suba se moderó y un nivel de actividad que podría empezar a mostrar algo de recuperación. El cuadro general, al menos por ahora, aparece más ordenado que meses atrás, aunque seguirá atado a la evolución política y al ritmo del programa económico que marque el Gobierno.
