El Gobierno lanza la privatización total de cuatro centrales hidroeléctricas clave
Mediante la Resolución 1569/2025, se puso en venta el paquete accionario completo de Alicurá, El Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila, dentro del plan de desinversión estatal en el sector energético.
El Ministerio de Economía anunció hoy, a través de la Resolución 1569/2025 publicada en el Boletín Oficial, la puesta en venta del 100% del paquete accionario de cuatro importantes centrales hidroeléctricas nacionales: Alicurá, El Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila. La firma de la resolución estuvo a cargo de Mariano Cúneo Libarona, en ausencia de Luis Caputo, quien se encontraba en Estados Unidos acompañando al presidente Javier Milei. Esta medida habilita la incorporación de la Circular Modificatoria N° 4 al pliego de bases y condiciones del Concurso Público Nacional e Internacional N° 504/2-0001-CPU25, dirigido a la venta total de las acciones de las represas.
La iniciativa forma parte del plan impulsado por el Gobierno para desprenderse de activos estatales, en línea con la agenda libertaria de privatizaciones, que también contempla la venta total de ENARSA y la transferencia de funciones energéticas al sector privado. Esta estrategia se sustenta en los decretos 286/2025 y 590/2025, que autorizaron la comercialización de las acciones mediante concursos públicos de alcance nacional e internacional.
Especialistas manifiestan que la actividad productiva no muestra signos de recuperación, con caídas que se profundizan desde marzo y abril, y un aumento de despidos en diversos sectores y regiones. Además, el crédito al sector privado disminuye mientras la inflación continúa en alza.
La oposición y sindicatos ya expresaron su rechazo, advirtiendo que la medida podría afectar la soberanía energética y generar aumentos en las tarifas eléctricas para los usuarios. El proceso de venta se espera que culmine antes de fin de año.
Desde el Ejecutivo aseguran que la privatización atraerá inversiones y mejorará la eficiencia operativa, aunque reconocen que el proceso requerirá una supervisión estricta para garantizar la continuidad del suministro y evitar impactos negativos en la población. Se espera que diferentes organismos internacionales y empresas del sector muestren su interés en participar, destacando el potencial estratégico de estas centrales para el abastecimiento eléctrico y la exportación de energía a países vecinos.