Pago de importaciones: se reducirá el plazo de 60 a 30 días a partir del lunes
La decisión fue tomada ayer por la tarde por las autoridades del Banco Central (BCRA) y entrará en vigencia la próxima semana.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) acaba de meter otro ajuste en los tiempos para acceder al mercado de cambios (MULC) para el pago de importaciones. Esta medida se da justo cuando el gobierno de Javier Milei enfrenta la inminente pérdida de una de sus principales fuentes de recaudación: el impuesto PAIS, que se va en diciembre. Este impuesto, que gravaba el acceso a dólares, tenía fecha de vencimiento y era una fuente clave de ingresos.
A través de la Comunicación A 8118, el Directorio del BCRA determinó que, desde el 21 de octubre, los bienes que todavía tenían un plazo de pago de hasta 60 días ahora tendrán que pagarse a los 30 días desde que entran por aduana. Esto viene a unificar los tiempos para todos los bienes, salvo algunos que tienen acceso inmediato al mercado de cambios, como la energía y otros productos específicos. Y no solo eso, ahora todas las empresas, sin importar si son grandes o chicas, van a tener los mismos plazos de pago.
Según el BCRA, la idea detrás de esta medida es darle un poco más de previsibilidad a las empresas, para que puedan organizar mejor sus pagos de importaciones. Dicen que esto va a ayudar a mantener la cadena productiva en movimiento y, de paso, contribuir a la reactivación económica. Además, al ordenar el flujo de pagos, también se espera que tenga un impacto positivo en los precios, algo que siempre es un tema sensible en Argentina.
Cabe recordar que el Impuesto País, pergeñado durante la administración de Alberto Fernández a principios de 2020, vencerá el 31 de diciembre de este año y no será prorrogado.
Esta es solo una de las tantas medidas que se vienen tomando desde el 10 de diciembre de 2023 para acomodar un poco las cosas en medio de un contexto económico bastante complicado. Ahora queda por ver cómo va a impactar en la economía real y en las empresas que dependen de las importaciones para seguir funcionando.