El plazo fijo intenta volver al radar del ahorrista: que bancos pagan más tasa hoy
Después de tocar mínimos tras las elecciones, las tasas del plazo fijo tradicional muestran una tibia recuperación. Aun así, el rendimiento sigue quedando corto frente a la inflación y empuja a muchos ahorristas a mirar alternativas como el UVA.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Tras varias semanas de tasas planchadas, el plazo fijo tradicional empezó a dar señales de vida. Algunos bancos comenzaron a subir los rendimientos que pagan por los depósitos en pesos, en un intento por frenar la salida de fondos. El movimiento es real, pero todavía moderado: la mejora no alcanza para compensar del todo la suba de precios.
Vale recordar que, antes de las elecciones, las tasas habían llegado a niveles cercanos al 50% TNA. Ese escenario quedó lejos. Luego del cambio de clima financiero, los rendimientos se desplomaron hasta la zona del 21%, uno de los pisos más bajos del año. En los últimos días, una de las entidades con mayor cantidad de clientes dio el primer paso y elevó su tasa hasta el 24,5%, marcando el inicio de una lenta recomposición.
El problema es que, aun con esta suba, la tasa sigue siendo real negativa. Con la inflación actual, el plazo fijo tradicional pierde alrededor de 0,5 puntos porcentuales. Otros bancos más chicos o regionales, como Banco Bica, CMF, Bancor, Banco del Sol, Mariva y Meridian, ofrecen tasas algo más altas, en el rango del 27% al 28%, que se acercan más al nivel de precios, pero todavía no logran ganarle con claridad a la inflación.
En la vereda de enfrente aparecen los plazos fijos UVA, que ajustan por inflación y tienen un plazo mínimo de 90 días. Estos instrumentos vienen ganando protagonismo de manera sostenida. En el mismo período, el stock creció de $183.000 millones a $247.000 millones, impulsado por el repunte inflacionario de los últimos meses y por la necesidad de cubrirse frente a la pérdida de poder adquisitivo.
Mirando hacia adelante, el panorama podría mejorar para el plazo fijo tradicional. El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) proyecta una inflación del 1,9% en enero, 1,7% en febrero y 1,8% en marzo. Si estas previsiones se cumplen y las tasas acompañan, no se descarta que los rendimientos en pesos vuelvan a ser positivos en términos reales. Al menos en el arranque del año, sin embargo, los UVA siguen corriendo con ventaja.
Plazo fijo vs dólar: qué dejó 2025
En el balance de todo 2025, el plazo fijo UVA mostró un desempeño sólido: ganó 5,5% medido en dólares y 2,9% en términos reales. Aun así, el dólar oficial terminó siendo una mejor cobertura, con una mejora del 7,8% real y del 10,5% en dólares para quienes eligieron esa alternativa.
De cara a los próximos meses, el dólar podría mostrar cierta presión inicial tras el cambio de esquema cambiario, para luego estabilizarse con el ingreso de divisas de la cosecha gruesa. En ese contexto, el plazo fijo UVA aparece como una opción defensiva frente al rebrote inflacionario esperado en el corto plazo. Más adelante, si la inflación sigue aflojando, el plazo fijo tradicional podría volver a ganar atractivo para el ahorro en pesos.
Bancos que más pagan plazo fijo (de mayor a menor tasa)
Tasas vigentes al martes 30 de diciembre
Tope del ranking (27%–28%)
Banco Bica: 28%
Banco CMF: 28%
Bancor (Banco de Córdoba): 27%
Reba Compañía Financiera: 27%
Banco del Sol: 27%
Banco Mariva: 27%
Banco Meridian: 27%
Bancos tradicionales / mayor base de clientes
Banco Macro: 24,5%
Banco Nación: 23,5%
ICBC: 23,5%
Banco Credicoop: 23%
Banco Provincia de Buenos Aires: 22%
Banco Galicia: 21%
Banco Santander: 21%
BBVA: 21%
Banco Ciudad: 20,5%
En este contexto, el ahorrista vuelve a enfrentarse al dilema clásico argentino: quedarse en pesos y perder un poco, o buscar cobertura y resignar liquidez. La leve suba de tasas es una señal positiva, pero todavía insuficiente para generar entusiasmo.
Por ahora, el plazo fijo tradicional sirve más como herramienta de corto plazo que como refugio real de valor. La clave estará en ver si los bancos siguen ajustando tasas en las próximas semanas y si la inflación, esta vez, acompaña el optimismo de las proyecciones.
