ARCA habilita el uso de Bopreal para cancelar deudas impositivas y aduaneras de importadores
La medida oficializada por la Resolución General N° 5.469 permite a empresas e individuos utilizar bonos emitidos por el Banco Central para saldar deudas acumuladas por importaciones, ofreciendo un alivio financiero al sector.
Tras el lanzamiento del Bopreal Serie 4, la Administración Federal de Ingresos Públicos (ARCA) habilita el uso de los Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (Bopreal) como forma de pago para saldar deudas impositivas y aduaneras. Aunque esta modalidad no es nueva, se define un procedimiento para gestionar su uso. Esta regulación fue oficializada mediante la Resolución General N° 5.469 y se complementa recientemente con detalles adicionales sobre su operativa. Empresas e individuos con deudas acumuladas por importaciones realizadas hasta el 12 de diciembre de 2023 podrán utilizar los bonos emitidos por el Banco Central para cancelar sus obligaciones.
El esquema establece que son válidos los bonos de las series 1A, 1B y 1C de los Bopreal, siempre que hayan sido emitidos entre la implementación del Decreto 72/2023 y el 31 de marzo de 2024, además de contar con aceptación formal por parte del organismo recaudador.
Para acceder a este beneficio, los tenedores deben gestionar la transferencia de bonos a través de un participante de Caja de Valores S.A., quienes los deben transferir a la cuenta del organismo en el Banco Nación. Esta operación será irrevocable y, una vez acreditados, Caja de Valores proporcionará detalles de la transacción, incluyendo el monto en pesos calculado por un tipo de cambio específico.
Los bonos serán registrados como Bonos Electrónicos, intransferibles y no negociables. Los contribuyentes encontrarán la opción de imputarlos a sus obligaciones fiscales, tanto de capital como de intereses, así como también a pagos relacionados con importaciones a través del Sistema Informático MALVINA (SIM). Los plazos para utilizar estos bonos varían según el año de transferencia: aquellos que los transfieran en 2025 podrán aplicarlos hasta el 31 de diciembre de 2030; los de 2026, hasta fines de 2031; y los de 2027, hasta 2032.
La resolución aclara que las imputaciones no generarán saldos a favor ni reintegros del Estado. Si se aplican más bonos de los permitidos para el pago de anticipos, solo se computarán hasta el límite establecido por el régimen correspondiente. Sin embargo, el exceso podrá ser utilizado en futuras obligaciones dentro del plazo de vigencia del bono, y el contribuyente deberá gestionar su solicitud a través del servicio de 'Presentaciones Digitales'.
Esta disposición busca aliviar la presión financiera sobre las empresas importadoras, muchas de las cuales enfrentan dificultades debido a las restricciones de acceso a divisas en años recientes. Al habilitar el uso de estos bonos como medio de pago, el Gobierno pretende ofrecer un mecanismo adicional para normalizar la situación fiscal del sector privado sin comprometer recursos del Tesoro, a la vez que busca canalizar la demanda de dólares mediante este instrumento. La resolución entrará en vigencia a partir del 17 de abril de 2025.
La implementación de esta medida ha generado expectativas positivas en el sector, que ve en ella una oportunidad para reactivar su operativa. Expertos destacan que, si se utiliza correctamente, podría facilitar la recuperación económica de muchas empresas, favoreciendo así el comercio exterior y la estabilidad del mercado.
