Por qué Deutsche Bank ya no espera una recesión en Estados Unidos | Dolarhoy.com
Mercado|06 de febrero de 2024

Por qué Deutsche Bank ya no espera una recesión en Estados Unidos

El banco indicó que ahora se prevé un crecimiento de la economía estadounidense del 1,9% en 2024, en promedio trimestral, frente al pronóstico anterior de 0,3%.

Por Gonzalo Andrés Castillo

 

A través de una nota publicada para sus clientes en el arranque de la semana, Deutsche Bank detalló que ya no espera que la economía de Estados Unidos entre en recesión durante el transcurso de este año.

 

El motivo sería el enfriamiento de la inflación, que pasó del 9,1% interanual de junio de 2022 al 3,4% de diciembre de 2023, y el regreso del mercado laboral a un "mejor equilibrio" sin que el desempleo aumente significativamente.

 

Anteriormente, el banco creía que la economía entraría en una leve recesión a medida que la Reserva Federal (Fed) ajustaba las tasas de interés para controlar la inflación, reduciendo las probabilidades de un aterrizaje suave.

 

En el reciente informe, Deutsche Bank indicó que ahora se prevé un crecimiento de la economía estadounidense del 1,9% en 2024, en promedio trimestral, frente al pronóstico anterior de 0,3%.

 

En el cuarto trimestre del 2023, la economía mejoró un 3,3%, superando las expectativas del mercado, impulsada por un sólido gasto de los consumidores. En tanto, el crecimiento anual alcanzó el 2,5%, desafiando las pesimistas predicciones de una recesión tras las significativas subas de tasas.

 

"Aunque la economía sigue enfrentándose a varios obstáculos (a saber, condiciones crediticias aún estrictas, crecientes tasas de morosidad de los consumidores y una desaceleración del mercado laboral), la resiliencia hasta la fecha apunta a una desaceleración más benigna en 2024 de lo que habíamos proyectado anteriormente", sostuvo Matthew Luzzetti, economista jefe en la institución.

 

Por otra parte, el experto agregó que todavía cree que la Fed comenzará a reducir las tasas de interés a partir de junio, cerrando el año con un recorte de 100 puntos básicos, en lugar de los 175 puntos básicos estimados en pasados estudios.