El dólar a nivel global se encuentra en mínimos anuales a la espera del recorte de tasas

El dólar venía moviéndose este martes cerca de sus valores más bajos del año, justo un día antes de que en Estados Unidos arranque un ciclo de flexibilización que muchos en los mercados creen que podría empezar con una fuerte baja de tasas.

El euro rondaba los 1,1132 dólares, apenas un poco por debajo del máximo del año, que fue de 1,1201 dólares. Por su parte, el yen bajó a 140,71, luego de haber coqueteado con un nivel más fuerte de 140 durante las operaciones del lunes, que fueron flojas por el feriado. El yen viene de capa caída este año, pero si la Reserva Federal (FED) de EE.UU. se pone más laxa con la política monetaria, podría recuperarse un poco. Si logra romper el nivel de 140 de forma sostenida, podría abrir la puerta para caer al piso de 127,215 que no se veía desde enero pasado.

En cuanto a los futuros de los fondos federales, vienen subiendo, y ahora los mercados ven con un 65% de chances que la Fed haga un recorte de tasas de 50 puntos básicos, cuando hace una semana esa probabilidad era solo del 30%. Esto cambió rápido después de que algunos medios de comunicación empezaron a hablar de una flexibilización más agresiva.

Jane Foley, estratega de divisas en Rabobank, comentó que cualquier señal de debilidad en los datos económicos de Estados Unidos que se publiquen este martes solo va a alimentar más la especulación de que el recorte podría ser de 50 puntos básicos. Más tarde este martes se esperan los números de ventas minoristas y producción industrial de agosto, pero lo más importante es la reunión de dos días de la Fed, que termina el miércoles.

Los estrategas de Macquarie, en una nota a sus clientes, señalaron que la Fed podría recortar las tasas ya sea 25 o 50 puntos básicos, pero que de todas formas el mensaje sería "tranquilo". Según ellos, el dólar podría aflojar frente a las principales monedas, incluso si el recorte es de solo 25 puntos básicos, con el yen siendo el que más ganaría.

Esto se debe a que las diferencias entre lo que hacen los bancos centrales de EE.UU. y Japón son cada vez más evidentes. Se espera que el Banco de Japón mantenga las tasas como están en su reunión del viernes, pero podría avisar que más adelante en octubre habrá cambios importantes.

La libra esterlina, que ha sido la estrella del G10 este año, subiendo un 3,9% frente al dólar, también sigue dándole pelea gracias a la resistencia de la economía británica y una inflación todavía alta. El lunes, la libra llegó a superar los 1,32 dólares, y este martes rondaba los 1,32095 dólares. El Banco de Inglaterra se reúne este jueves y se espera que deje las tasas en el 5%, aunque hay un 39% de chances de que hagan un recorte.

Mientras tanto, los dólares australiano y neozelandés se cotizaban a 0,67555 y 0,6198 dólares respectivamente, luego de que ambos subieran el lunes. La atención de los operadores está más puesta en la Fed que en los problemas de la economía china, que siguen agravándose. En China, los mercados están cerrados por el Festival del Medio Otoño hasta el miércoles, pero el yuan offshore se mantenía estable en 7,095 dentro de su nuevo rango.