Que tus emociones no te hagan perder plata | Dolarhoy.com
Inversión|30 de agosto de 2022

Que tus emociones no te hagan perder plata

Las emociones son tus principales enemigos a la hora de invertir. La buena noticia es que podés implementar unos simples pasos para usarlas a tu favor.

Por Matías Daghero

Agente Asesor Global de Inversión, Presidente de @closingbelladv

 

Warren Buffett, uno de los mayores inversores de todos los tiempos, tiene una frase que dice que para el éxito en las inversiones no hace falta ser más inteligente que el resto. Lo que realmente hace la diferencia es ser más disciplinado que el resto.

 

Parece muy simple pero la realidad es que no lo es. Muchas veces en cuestionarios de perfil del inversor se plantea la pregunta de cuánto estarías dispuesto a soportar como pérdida antes de vender. Pero ese número no nos dice cómo vamos a reaccionar cuando eso realmente ocurra. Y ahí nos olvidamos del objetivo de inversión que nos habíamos trazado. ¿Por qué pasa esto?

 

 

 

Un mercado irracional

Hay algo que no se suele poner en los titulares de Bloomberg y es que el mercado está dominado por las emociones. Esas emociones influyen en el precio de los activos tanto o más que los balances de las empresas.

 

Principalmente el mercado se mueve por el miedo y la codicia. No parecen emociones muy positivas, ¿verdad? ¿Cómo hacemos para que no nos dominen?

 

El miedo es mal consejero

El miedo muchas veces nos genera una tendencia a actuar. Y eso en el mundo de las inversiones es una gran desventaja. Quienes no pueden resistir la tentación de hacer algo cuando los precios bajan son los que ven los peores resultados. Dejame que te lo muestre con un ejemplo.

 

En marzo 2020 hubo una fuerte baja en toda la bolsa. No se salvó nadie, ni siquiera una empresa tan sólida como Coca Cola. Pero, si lo pensamos bien, ¿Realmente iba a pasar algo con el negocio de Coca Cola? Con la mente fría era fácil darse cuenta de que no. Viendo tu cartera bajar todos los días no era tan sencillo y muchos vendieron en un mal momento.

 

Esto es algo común en situaciones de bajas. Quienes no han logrado aún la disciplina de ser inversores experimentados tiene miedo a ver mayores caídas en sus activos y deciden vender sólo por ver bajas de precio. Ser una persona de acción tiene grandes ventajas en la vida. Pero en las finanzas te puede jugar una mala pasada.

 

A veces quienes recién se inician en inversiones creen que hay que hacer algo cuando los precios bajan. Y por eso terminan tomando malas decisiones. Esto pasa en otros ámbitos también, incluido el fútbol. Un estudio del NY Times en 2008 mostraba una estadística que decía que en la mayor parte de los casos la mejor estrategia del arquero en los penales era mantenerse en el medio del arco, no moverse. Sin embargo, en el 94% de los casos saltan a la derecha o izquierda. Porque, claro, ¿Quién quiere quedar como que le hicieron un gol y que no hizo nada para evitarlo?

 

Sé codicioso cuando los demás son temerosos

Otro consejo de Warren Buffett es ser codicioso cuando los demás son temerosos y temeroso cuando los demás son codiciosos. Bueno, la mayor parte de los inversores suele hacer al revés. Se suben a las inversiones que más están subiendo y que están en boca de todos, muchas veces corriendo el riesgo de entrar tarde. Esto quiere decir que caen en el sesgo de asumir que el pasado reciente predice el futuro, o sea, que lo que está subiendo seguirá subiendo y lo que está bajando va a continuar en caída. Por eso todos quieren invertir cuando la bolsa sube y nadie cuando baja, a pesar de que lo inteligente sería armar posición con precios más bajos.

 

A su vez, se da el efecto manada. Cuando algo sube, nadie quiere quedarse afuera. Es muy humano no querer perdernos una oportunidad que todos están aprovechando. Ese tipo de inversiones son las más peligrosas. Nunca inviertas en algo sólo porque lo viste en un programa o porque todos tus amigos lo hacen. Un asesor profesional puede ayudarte evitando que caigas en esas trampas que dañan tu patrimonio.

 

A veces pasa que se subestima el rol que tiene la psicología del inversor en el rendimiento de tu cartera. No alcanza con investigar acciones o hacer cálculos para tener éxito como inversor. Estar preparado para afrontar las emociones que inevitablemente van a generar los altibajos del mercado será la mejor protección de tu patrimonio.