Cuál es el mayor problema que Intel necesita resolver para seguir creciendo
A los precios actuales, las acciones cotizan a múltiplos comparables con la burbuja puntocom, lo que genera dudas sobre su justificación.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Redactor especialista en finanzas y mercado de capitales
Las acciones de Intel acumulan una suba del 48% en 2025, impulsadas por nuevos socios estratégicos y aportes de capital que suman más de USD 15.000 millones. La compañía cerró un acuerdo con Nvidia, que incluye la venta de acciones por USD 5.000 millones, además de una inyección de USD 2.000 millones de SoftBank y el adelanto de USD 8.900 millones en financiamiento aprobado por la administración Trump. Este respaldo elevó el valor de mercado de Intel en más de USD 50.000 millones en lo que va del año.
Sin embargo, el entusiasmo bursátil contrasta con los problemas estructurales de la empresa. Su negocio de fundición, que representa un tercio de los ingresos, generó cerca de USD 18.000 millones en ventas en los últimos cuatro trimestres, pero arrojó pérdidas superiores a USD 13.000 millones. Analistas advierten que, sin un cliente de gran escala que lleve sus plantas a plena capacidad, la división difícilmente logre rentabilidad.
Wall Street proyecta beneficios ajustados de apenas USD 640 millones en 2025 y USD 3.200 millones en 2026, sobre ingresos de USD 52.000 y USD 54.000 millones, respectivamente. A los precios actuales, las acciones cotizan a múltiplos comparables con la burbuja puntocom, lo que genera dudas sobre su justificación. Citigroup rebajó recientemente la recomendación de Intel a "vender", señalando escasas probabilidades de éxito en la fundición.
El propio director ejecutivo de Nvidia, Jensen Huang, subrayó que seguirá trabajando con Taiwan Semiconductor Manufacturing Company, limitando el alcance inmediato del acuerdo con Intel.
Mientras la compañía enfrenta gastos de capital cercanos a USD 18.000 millones en 2025 y USD 15.000 millones en 2026, su flujo de caja libre permanece en terreno negativo. Inversores y analistas coinciden en que Intel necesitará más que aliados de peso para transformar su costosa apuesta de fabricación en un negocio sostenible.
Invertir en Intel desde Argentina
Desde Argentina se puede invertir en Intel de manera rápida y sencilla. Solo basta con abrir una cuenta comitente en una sociedad de bolsa regulada por la Comisión Nacional de Valores como lo es Bull Market Brokers, proceso gratuito que no llevará más de cinco minutos, y, tras depositar los fondos deseados, adquirir Cedears.
Los Cedears o Certificados de Depósito Argentinos son instrumentos que equivalen a comprar la acción subyacente que cotiza en el exterior (NASDAQ: INTC), pero se pueden operar en pesos (BCBA: INTC) y siguen la evolución del dólar CCL, por lo que permiten evadir el riesgo argentino y, a la vez, cubrirse de un eventual salto cambiario.