Ante posible aprobación exprés, los inversores apuestan por un salto en el precio de las acciones de Eli Lilly
El mercado ya especula con ingresos millonarios y un alivio en el costo de los tratamientos tras posible aprobación del medicamento de LLY contra la obesidad.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
El organismo regulador de EE.UU, la FDA, abrió la puerta a aprobar en apenas dos meses el orforglipron, el nuevo fármaco oral de la farmacéutica Eli Lilly, que busca competir con los inyectables de Novo Nordisk.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) incluyó a su nueva píldora para la obesidad, orforglipron, en un proceso de revisión exprés que recorta los tiempos de 10 meses a solo uno o dos. El medicamento busca convertirse en la alternativa oral a los inyectables GLP-1, que hoy dominan el mercado con marcas como Ozempic y Wegovy, y que en muchos casos resultan inaccesibles para los pacientes por sus precios elevados.
El impacto no sería solo financiero. Con casi el 40% de la población adulta de Estados Unidos en situación de obesidad, el costo de los actuales tratamientos se volvió un problema para aseguradoras y empleadores, que consideran insostenibles los precios de hasta 8.000 dólares anuales por paciente. En ese marco, la expectativa es que la competencia de nuevos fármacos orales ayude a bajar los valores de mercado y amplíe el acceso.
Mientras tanto, Novo Nordisk también espera la evaluación de su propia píldora GLP-1, aunque los expertos señalan que, por su complejidad de fabricación, podría tener menos margen para ajustar precios frente al avance de Lilly. Todo indica que 2026 será un año clave en la batalla farmacéutica por el negocio de los tratamientos para la obesidad.
El desafío, ahora, pasa por cumplir con la promesa de accesibilidad. Si los nuevos medicamentos llegan con precios más razonables, el impacto sanitario podría ser enorme. Pero si repiten la lógica de exclusividad y sobreprecios, difícilmente logren torcer la tendencia que ya generó polémicas y tensiones en el sistema de salud norteamericano.
Las acciones de LLY subían este martes un 1% en la apertura del mercado a 756 dólares cada una.