Milei en Davos: "El mundo ha abrazado a la Argentina, que se ha convertido en ejemplo mundial”.

El presidente Javier Milei se presentó en el Foro Económico Mundial de Davos, encuentro anual donde se juntan más de 3 mil líderes de todo el mundo para charlar sobre los desafíos globales y fomentar la cooperación entre países. Al arrancar su discurso, Milei declaró: “El mundo ha abrazado a la Argentina, que se ha convertido en ejemplo mundial”.

El presidente no anduvo con vueltas y arrancó fuerte contra la ideología woke, diciendo que “es la epidemia que hay que curar y el cáncer que hay que extirpar”. Además, apuntó directo contra el rol del Foro, los organismos de crédito internacionales y la Unión Europea por ser defensores del progresismo global. También cuestionó a la ideología de género, el feminismo, el ecologismo extremo y las banderas vinculadas al cambio climático.

Milei recordó su discurso del año pasado en este mismo Foro: “Les dije que era el comienzo de una nueva argentina que estaba infectada de socialismos durante mucho tiempo”, y agregó: “Ya no me siento tan solo”.

La “ideología woke” en la mira

En su discurso, Milei dedicó buena parte del tiempo a hablar de lo que él llama “el virus mental de la ideología woke”. Según el presidente, esta corriente “ha colonizado instituciones importantes, desde partidos políticos y universidades, hasta medios de comunicación y organismos internacionales”.  

Para él, el feminismo radical, la ideología de género y el ecologismo extremo han sido usados como herramientas para expandir el Estado y debilitar la libertad individual.

Además, señaló que el cambio climático y otras cuestiones globales han sido “pervertidas” para promover una agenda que, según su visión, frena el desarrollo económico y social.

Criticó fuerte la “distribución arbitraria de la riqueza” y el crecimiento del aparato estatal, comparándolo con los sistemas colectivistas del siglo pasado que, según él, hicieron que Occidente perdiera el rumbo. Citando a Ayn Rand, describió esta situación como un ejemplo del “partido del Estado”, que prioriza sus propios intereses en lugar de los de los ciudadanos.

Milei se mostró optimista respecto al surgimiento de lo que definió como una “alianza internacional” de países que buscan la libertad. “Lentamente, se ha ido formando una alianza internacional de todas las naciones que queremos ser libres y abrazar las ideas de la libertad”, afirmó.  

Entre los líderes que destacó están Elon Musk, Giorgia Meloni, Nayib Bukele, Viktor Orbán, Benjamín Netanyahu y Donald Trump. Los nombró como compañeros en esta cruzada por el cambio.

Defensa de Elon Musk

El presidente también aprovechó para elogiar a Elon Musk. “Aprovecho esta oportunidad para saludar al maravilloso Elon Musk, quien con su lucha contra la censura y su visión por la libertad de expresión nos ha inspirado a muchos de nosotros. Argentina se siente cerca de personas como usted, que han entendido que la libertad es el motor del progreso”, dijo.

Criticó las acusaciones que, según él, el “wokismo” ha lanzado contra Musk: “Injustamente ha sido vilipendiado por el wokismo, en las últimas horas, por un inocente gesto que lo único que significa es su (inaudible) y gratitud con la gente”.

En una entrevista previa con Bloomberg, Milei reafirmó que eliminar el cepo es una prioridad: “Es aberrante y lo voy a sacar, lo que sucede es que yo soy liberal libertario, yo no soy liberal libertarado”. Sobre esto, explicó que los controles de capitales son, en su opinión, una herramienta de expropiación que vulnera derechos fundamentales como la propiedad. 

“El cepo es aberrante y lo voy a sacar, pero yo soy liberal y libertario, no libertarado”, remarcó. Según el presidente, la salida del cepo será más rápida si se accede a financiamiento externo, pero dejó claro que cualquier acuerdo con el FMI o fondos de inversión estará destinado exclusivamente a fortalecer las reservas del Banco Central.

Milei comparó esta segunda participación en Davos con la del año pasado. “Cuánto ha cambiado en tan poco tiempo... Hace un año me paré aquí frente a ustedes en soledad y dije algunas verdades sobre el estado del mundo occidental que fueron recibidas con cierta sorpresa y estupor por buena parte del establishment político, económico y mediático de Occidente”. Y concluyó: “Un año después debo decir que ya no me siento tan solo porque el mundo ha abrazado a la Argentina, que se ha convertido en ejemplo mundial de responsabilidad fiscal, de compromiso con nuestras obligaciones, de cómo terminar con el problema de la inflación y también de una nueva forma de hacer política, que consiste en decirle la verdad a la gente en la cara y confiar en que la gente entenderá”.