La inflación baja en octubre a 2,7%: expectativas de estabilización

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dio la noticia: la inflación de octubre pegó una bajada, situándose en 2,7%, lo que marca un alivio respecto al 3,5% de septiembre. Con esto, en los últimos doce meses, los precios acumulan un impresionante 193% de aumento.

Esta desaceleración de los precios viene siendo la esperanza del Gobierno, que intenta consolidar una tendencia a la baja en la inflación con varias medidas. Desde Economía ya venían anticipando que este dato iba a ser uno de los más bajos en años, impulsado por una menor presión en áreas clave como los alimentos y los servicios regulados.

En la Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, ya se había notado el descenso, pasando de un 4% a 3,2% en octubre. La clave acá está en los rubros como alimentos y bebidas, que no aumentaron tanto como se esperaba. Así, con una inflación que afloja un poco, la expectativa es que noviembre mantenga esta tendencia, aunque algunos sectores como ropa y calzado, o servicios como hoteles y restaurantes, sigan mostrando subas.

¿Qué está haciendo el Gobierno?

Para frenar la escalada de precios, el Gobierno optó por manejar el tipo de cambio de forma más tranquila, subiendo el dólar oficial solo un 2% mensual. Esto funciona como un "ancla" que ayuda a bajar las expectativas inflacionarias. Además, el Banco Central bajó la tasa de interés de referencia al 35% anual para darle una manito a la economía sin desatar la inflación.

Los analistas piensan que, si se sigue en esta línea, la inflación podría estabilizarse en torno al 3% mensual en los próximos meses. Eso sí, no descartan que a partir de abril del año que viene, los números puedan dar otro respiro.

¿Qué se espera para los próximos meses?

Los alimentos y bebidas, que tienen mucho peso en el bolsillo de la gente, registraron incrementos menores este mes, lo que ayudó bastante a frenar la inflación general. Para noviembre, las consultoras privadas creen que el índice seguirá más o menos estable, aunque podrían verse subas en algunos precios regulados y productos estacionales.

Desde Comercio ya vienen monitoreando de cerca los datos de inflación núcleo (sin alimentos frescos ni servicios regulados) y todo parece indicar que esta moderación en los precios podría continuar. Sin embargo, algunos economistas advierten que, si bien la situación está mejorando mes a mes, el nivel de precios sigue altísimo, y con una inflación anual de más del 200%, el poder adquisitivo de la gente sigue golpeado.

Por otro lado, el Indec tiene en la mira la implementación de un índice de precios actualizado, que daría más peso a los servicios en la medición. Aunque aún no hay fecha confirmada, esto podría reflejar de forma más precisa el consumo actual de los hogares.

Finalmente, el Banco Central sigue enfocado en mantener una tasa de interés real positiva para que el ahorro en pesos siga siendo atractivo y no se genere más presión sobre el dólar. Pero algunos analistas advierten que, aunque es un buen indicio que la inflación mensual esté bajando, el contexto sigue siendo complicado para el bolsillo de la gente.

Así que, de a poco, parece que el bolsillo de los argentinos empieza a sentir menos el golpe, aunque el desafío de bajar la inflación de verdad sigue siendo grande.