La industria automotriz cayó un 29,3% en noviembre y encendió las alarmas del sector
La producción mostró una fuerte baja, no llegó a las 40 mil unidades y cayó casi 30% contra el año pasado. Aun así, el acumulado del año muestra números más parejos y un repunte marcado en las ventas mayoristas.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Noviembre vino con freno de mano puesto para las terminales automotrices. Con 18 días hábiles —cuatro menos que en octubre— la industria fabricó 37.961 vehículos, quedando por debajo de las 40 mil unidades y marcando una baja del 19,6% respecto del mes previo. Si la comparación es con noviembre del año pasado, el golpe es todavía más duro: un desplome del 29,3%.
De todos modos, el resultado anual todavía aguanta. Entre enero y noviembre se produjeron 464.408 unidades, apenas 0,9% menos que en el mismo tramo de 2024. Los números surgen del informe de ADEFA, y confirman una tendencia movida, con meses de mejora y otros de retroceso según disponibilidad de días, ajustes en las plantas y cambios en el mercado.
En materia de exportaciones, noviembre dejó 31.248 unidades enviadas al exterior. Frente a octubre hubo un avance del 5,5%, pero comparado con noviembre del año pasado se registró una baja del 3,1%. El acumulado 2025 terminó en 260.681 vehículos exportados, un 9,5% por debajo del volumen del año anterior.
En lo que hace a ventas mayoristas, las terminales entregaron 35.249 unidades a los concesionarios, una caída del 21,3% respecto de octubre y del 12,1% interanual. Sin embargo, el acumulado del año sorprende: 535.270 vehículos comercializados, lo que significa un salto del 47,9% frente a igual período de 2024.
Desde ADEFA insistieron en que el frente externo sigue siendo el punto más delicado para la industria, con mercados más lentos y restricciones que pegan de lleno en el volumen exportado. Por eso, Pérez Graziano volvió a pedir alivio impositivo en todos los niveles, señalando que una reducción sostenida de la carga fiscal ayudaría a fortalecer la competitividad del sector.
Con el año prácticamente cerrado, la expectativa está puesta en cómo arrancará 2026. El sector cree que, si se acomodan los programas industriales, se estabiliza la demanda externa y se mantienen las ventas mayoristas, podría haber un rebote. Pero por ahora, noviembre dejó claro que la recuperación no está del todo asegurada.
