En once meses, el Banco Central acumuló reservas brutas por USD 7.141 millones, el mejor resultado desde 2017
El aumento en reservas brutas contrasta con la pérdida de USD 23.084 millones en 2023. La gestión actual logró alcanzar un saldo positivo a principios de abril.
El Banco Central de Argentina ha experimentado un incremento en sus reservas brutas, sumando USD 7.141 millones hasta finales de noviembre de 2024. Este resultado no solo marca el máximo para este lapso desde 2017, sino que también contrasta con el año anterior, cuando se reportó una pérdida de USD 23.084 millones en el mismo período. Esta última pérdida se debió principalmente a una sequía que afectó de manera grave las exportaciones agroindustriales.
Al inicio de diciembre de 2023, la actual administración enfrentó un saldo negativo en reservas internacionales netas de USD 11.645 millones. Sin embargo, tras haber implementado las medidas adecuadas, se logró una recomposición, alcanzando una situación positiva a principios de abril de 2024. Desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) destacan que, “A pesar de que las reservas netas mantuvieron cierta estabilidad hasta julio, el Banco Central comenzó a vender reservas después...”.
En cuanto al balance cambiario de la institución hasta octubre, los datos revelan que Argentina ha podido revertir el saldo negativo en las cuentas corriente y financiera durante 2024. Este cambio ha sido impulsado por un superávit en los cobros por exportaciones netas de bienes, que alcanzaron un saldo positivo de USD 18.002 millones en los primeros diez meses del año. Explican que “este resultado se encuentra significativamente por encima del año pasado”, gracias a una recuperación en la liquidación de dólares del sector agro y a un saldo neto positivo de otros sectores.
La recesión económica ha ocasionado una disminución en las importaciones. A la vez, los cambios en los métodos de pago han facilitado el diferimiento de ciertos gastos en la primera parte del año, lo que ha amortiguado temporalmente la demanda de divisas. De esta forma, el superávit registrado en las cuentas de bienes ha permitido cubrir el saldo deficitario de la cuenta de servicios, que ha estado más controlado en comparación con los dos años anteriores, así como afrontar los pagos netos por ingreso primario, que han llegado a ser los más altos desde 2016.
Por otro lado, la cuenta financiera del balance acumulada hasta octubre muestra un saldo positivo de USD 579 millones, impulsado principalmente por los efectos del blanqueo de capitales en octubre. Además, la variación de las reservas brutas se benefició de ajustes contables y de la valoración de reservas en otras divisas.
Sin embargo, al analizar el comportamiento mensual, se observa que desde junio la cuenta corriente ha comenzado a mostrar resultados negativos, culminando con un déficit de USD 1.581 millones en octubre. Si se desglosan los conceptos, se nota que los cobros por exportaciones de bienes, particularmente del sector oleaginoso y cerealero, están mostrando solidez, mientras que otros sectores han comenzado a presentar una demanda neta de divisas a partir de mayo debido a ajustes en los pagos de importaciones.
En cuanto a la cuenta de servicios, el año empezó casi equilibrado, pero desde junio comenzó a generar una mayor presión sobre la demanda de dólares, alcanzando en octubre su déficit con un saldo negativo de USD 744 millones. Adicionalmente, los pagos de intereses por ingreso primario han evidenciado un aumento considerable desde julio hasta la fecha.