El Tesoro colocó $3,8 billones en una licitación especial y busca estabilizar el mercado de pesos
Con un solo bono dirigido a bancos, el Gobierno absorbió casi la totalidad de la liquidez excedente y moderó la volatilidad de las tasas de corto plazo.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
La Secretaria de Finanzas logró este lunes un resultado clave en su licitación extraordinaria: adjudicó $3,788 billones sobre un total de $3,799 billones ofertados, prácticamente el 100%. El instrumento elegido fue el bono TAMAR con un spread del 1% por encima de la tasa mayorista de plazo fijo, en una operación diseñada a medida para los bancos, en línea con el reciente cambio de encajes decidido por el Banco Central.
Pablo Quirno, secretario de Finanzas, celebró el resultado y aseguró que la licitación “contribuye a completar el objetivo de absorción monetaria” tras el ajuste de encajes que empezó a regir la semana pasada. Vale recordar que este lunes también se liquidaron $5,8 billones de la licitación anterior, lo que había dejado a los bancos con una fuerte masa de pesos líquidos por colocar.
Pablo Lazzati, de Insider Finance, destacó que la licitación fue positiva en tres frentes: monto adjudicado, tasa y efecto sobre las cauciones. “Hubo consenso entre los bancos y el Tesoro, la tasa fue razonable y ya se nota una normalización en el mercado secundario”, aseguró.
En Puente remarcaron el carácter atípico de la operación: un solo instrumento, destinado exclusivamente a entidades bancarias, con un spread bajo en comparación con la semana pasada (1% contra 6%-7,5%). “Incluso así, sigue siendo una tasa muy elevada en términos históricos”, advirtieron.
En el corto plazo, la licitación le da al Gobierno oxígeno para mantener a raya la presión sobre el dólar y contener la volatilidad financiera. Pero en la City advierten: el desafío no termina acá. Cada vencimiento de deuda en pesos será una prueba de fuego para medir la confianza del sistema financiero en la estrategia oficial.