Tras la vuelta al mercado en dólares, Finanzas encara una licitación en pesos clave para cerrar el año
El Tesoro debe cubrir vencimientos por $40 billones el próximo lunes y necesita un alto nivel de renovación para evitar asistencia del Banco Central. Habrá una amplia gama de instrumentos para tentar a los inversores.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Después del buen resultado obtenido con la emisión en dólares de esta semana —donde el Gobierno logró colocar u$s1.000 millones a una tasa cercana al 9,25% anual— ahora la atención vuelve a centrarse en la deuda en pesos. La Secretaría de Finanzas enfrenta el lunes una licitación cargada: se vienen vencimientos por $40 billones, de los cuales casi $14 billones están en manos del sector privado.
Con apenas $3,3 billones depositados en el Banco Central, el margen para dejar parte de esos pagos sin refinanciar es mínimo. Para evitar que el BCRA deba asistir al Tesoro con emisión y agrandar la base monetaria, el Gobierno necesita asegurar un piso de renovación del 76%. La estimación parte de un supuesto clave: que los organismos públicos renueven el 100% de los títulos que poseen, tal como figura en la operatoria publicada en el Boletín Oficial. Eso dejaría unos $13,8 billones a resolver con el sector privado.
En la última licitación de noviembre el Tesoro se vio obligado a convalidar una suba de tasas para garantizar una buena renovación, algo que ahora busca evitar. Con el horizonte de pagos tan cargado, Finanzas deberá seducir a los inversores privados para alcanzar ese 76% mínimo sin tensar al Banco Central.
En el segmento CER, se reabren las series X29Y6 —con vencimiento en mayo de 2026— y TZX28 —que paga el 30 de junio de 2028—. Además, se suman dos emisiones nuevas: la LECER X30N6, que vence el 30 de noviembre de 2026, y el bono TZXY7, con cierre el 30 de mayo de 2027.
Para quienes buscan cobertura cambiaria, habrá una reapertura del D30A6, el bono dólar linked que expira el 30 de abril de 2026. Y dentro del esquema TAMAR, vuelve a licitarse la letra M31G6, con vencimiento el 31 de agosto de 2026.
La apuesta del Gobierno es que esta combinación amplia de instrumentos le permita cubrir una licitación que llega con peso propio, en un mes donde el margen operativo es ajustado y los vencimientos no dan respiro. En el Palacio de Hacienda confían en que el resultado permitirá cerrar el año financiero sin sobresaltos.
De cara al arranque de 2026, Finanzas busca ordenar el perfil de vencimientos y consolidar una estrategia que reduzca la dependencia de emisiones de corto plazo. La licitación del lunes será un termómetro clave para medir el nivel de acompañamiento de los inversores en esta nueva etapa.
