El FMI se fue del país sin novedades y el Gobierno sigue esperando
Si bien destacaron que las reuniones fueron buenas, en concreto habrá que seguir a la espera de un desembolso.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
El Fondo Monetario Internacional terminó su visita a Buenos Aires y, aunque tiraron buena onda diciendo que fue un “diálogo constructivo”, la realidad es que no hay ninguna fecha cerrada para un nuevo acuerdo ni tampoco se sabe si habrá algún desembolso de plata. Tampoco está claro qué condiciones pondría el Fondo, como levantar el cepo o ajustar la tasa de interés.
Desde el FMI sacaron un comunicado en el que básicamente dijeron que "todo bien", pero que hay que seguir charlando en las próximas semanas. Más detalles se esperan el jueves en la conferencia de prensa de su vocera, Julie Kozack.
Del lado del Gobierno, el vocero Manuel Adorni también reconoció que no hay fecha para la firma del acuerdo, pero aseguró que "se va a hacer" porque, según él, es la primera vez en la historia que un Gobierno argentino hace las cosas como corresponden y pone en orden las cuentas. Sobre cuánta plata podría mandar el FMI o si van a exigir levantar el cepo, la respuesta fue bastante ambigua: "No hay montos definidos, si es que los hay, ni tampoco está definido qué va a pasar con el cepo".
El problema para el Gobierno es que las reservas netas están en rojo por unos 9.000 millones de dólares. Si bien hay dólares disponibles para cubrir alguna corrida, eso implicaría, por ejemplo, tocar plata de los depósitos. Encima, con la deuda en pesos y el atraso del dólar oficial, la salida del cepo no parece viable sin antes acumular reservas.
El FMI, en su revisión del acuerdo de 2022, resaltó que la estabilidad se logró por el ajuste fiscal, pero que el atraso del dólar y los controles cambiarios pueden complicar la acumulación de reservas. También insistieron en que la tasa de interés tiene que ser positiva en términos reales para contener la inflación y evitar más desequilibrios.
El Gobierno, por su parte, ya bajó el ritmo de devaluación al 1% desde febrero, lo que hará que el peso se aprecie aún más. Pero el tema de la tasa de interés sigue siendo un misterio. En diciembre ya había quedado negativa en términos reales y no está claro qué van a hacer con eso. En respuesta al FMI, el Gobierno dijo que no fue solo el ajuste lo que calmó la inflación, sino que el dólar planchado también jugó un papel clave.