Veto a la Ley de Financiamiento Universitario: hoy sesión en Diputados
Hoy, la Cámara de Diputados decide el destino del veto a la ley de financiamiento universitario. ¿Ventaja para el oficialismo?.
Por redacción
El día de hoy, la Cámara de Diputados se preparó para una sesión especial vital acerca del veto a la Ley de Financiamiento Universitario, donde el oficialismo mostró una ventaja en el tablero político. Se estimó que al menos 84 diputados, cifra clave para asegurar la continuidad de la decisión de Javier Milei, se alinearon con la postura del Gobierno. Mientras tanto, desde la oposición, la presión se intensificó tras la masiva movilización que tuvo lugar el miércoles pasado en la Plaza del Congreso.
Con la sesión convocada para las 11 de la mañana, el oficialismo confió en que las fugas dentro del bloque de la UCR jugaran un papel determinante. En particular, los votos "valieron doble" cuando algunos representantes, como Álvaro González y Héctor “Coneja” Baldassi, se inclinaron por el oficialismo, lo que podría afectar las cuentas en contra de la ley.
La diputada Ana Clara Romero, de Chubut, fue una de las voces que generaron incertidumbre al haber mostrado apoyo a las universidades públicas recientemente, aunque todavía no se definió su postura. En este contexto, Sabrina Ajmechet confirmó que asistirá y votará a favor del veto, lo que fue una buena noticia para las filas del Gobierno.
Mientras tanto, el panorama para el PRO indicó 33 votos seguros en contra del financiamiento universitario, pero también emergieron incertidumbres. El misionero Emmanuel Bianchetti y el fueguino Héctor “Tito” Stefani podrían no estar presentes, lo que cambiaría la dinámica de la votación.
En el bando opositor, la UCR estuvo en el centro de la controversia, ya que algunos de sus miembros, conocidos como el “grupo de los cinco”, se prepararon para dar la espalda al bloque. El oficialismo también logró sumar nuevos apoyos: Mariano Campero, Luis Picat y otros, que previamente se habían ausentado.
Por su parte, Encuentro Federal se presentó firme con 15 de sus 16 miembros dispuestos a respaldar la ley universitaria, mientras que la Coalición Cívica y el Frente de Izquierda manifestaron su apoyo unitario en contra del veto presidencial.
La estrategia del oficialismo se centró en asegurar las ausencias y convertir a esos ausentes en un aliado tácito. Dada la complejidad de la situación, el oficialismo no solo dependió de los votos seguros, sino de la manipulación de las ausencias para mantener a raya a la oposición, que necesitó de 169 votos para poder revertir el veto.
Finalmente, un personaje a seguir de cerca fue Lourdes Arrieta, quien se mostró indecisa en su apoyo a la ley. Su ambigüedad en declaraciones públicas sugirió que la presión recibida por parte del movimiento libertario podría hacerla cambiar de postura, aunque su asistencia a la sesión siguió siendo una incógnita.