Fitch rebajó la calificación de deuda de Estados Unidos

La calificadora de riesgo advirtió sobre un deterioro constante en los estándares de gobernanza en los últimos 20 años, incluidos los asuntos fiscales y de deuda del país.

Por Gonzalo Andrés Castillo

Redactor especialista en finanzas y mercado de capitales

Miércoles 02 de agosto del 2023 a las 11:44 am

 

La calificadora de riesgo Fitch rebajó la calificación de deuda de Estados Unidos de AAA a AA+ debido a la "erosión de la gobernanza" y el deterioro fiscal esperado en los próximos tres años. La decisión se produce tras repetidas crisis relacionadas con el límite de endeudamiento del país. La última vez que Estados Unidos sufrió una rebaja en su calificación crediticia fue en 2011, cuando la agencia S&P también la redujo a AA+.

 

El comunicado de Fitch señaló que la calificación tiene perspectiva estable. Sin embargo, advirtió sobre un deterioro constante en los estándares de gobernanza en los últimos 20 años, incluidos los asuntos fiscales y de deuda. La agencia también indicó que el gobierno de EE. UU. carece de un marco fiscal a medio plazo y ha mostrado progresos limitados en abordar los desafíos relacionados con el aumento de los costos de la seguridad social y Medicare por el envejecimiento de la población.

 

El levantamiento del techo de la deuda, que solía ser rutinario, se ha vuelto polémico en los últimos años debido al aumento del partidismo político que obstaculiza una resolución para elevar o suspender el límite de endeudamiento antes de las fechas límite. En mayo, Fitch colocó el crédito del país en "vigilancia de calificación negativa", reflejando estas dificultades.

 

En 2023, los republicanos en la Cámara de Representantes utilizaron la votación sobre el límite de la deuda como palanca para forzar recortes en las prioridades de gasto demócratas, lo que llevó a una prueba de fuerza política que amenazó con un caos antes de llegar a un acuerdo para evitar un impago catastrófico, pero sin satisfacer completamente las exigencias republicanas de recortes. Por estas idas y vueltas, la situación política y fiscal de Estados Unidos sigue siendo motivo de preocupación para los inversores y la comunidad internacional.

 

Tras el anuncio, la secretaria del Tesoro Janet Yellen expresó su desacuerdo con la decisión, calificándola de "arbitraria y basada en datos obsoletos". La funcionaria destacó que los valores del Tesoro estadounidense siguen siendo el activo seguro y líquido preeminente del mundo y que la economía del país es fundamentalmente fuerte.

 

 

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