China eximirá algunos productos estadounidenses del cobro de aranceles

De esta forma, Pekín busca mitigar las consecuencias económicas de la guerra comercial. Algunas importaciones recientes de EE.UU. no han estado sujetas a aranceles, dijeron desde AmCham.

Por Eric Nesich

Periodista especializado en Economía y Finanzas

Viernes 25 de abril del 2025 a las 3:18 pm

 

China está cediendo un poco en la guerra comercial con Estados Unidos: empezó a sacar algunos productos estadounidenses de la lista negra de aranceles altísimos (del 125%) y les está pidiendo a las empresas que digan qué cosas clave necesitan sin impuestos. Esto lo contaron empresas que ya fueron avisadas, y es una de las señales más claras de que a Pekín le está empezando a preocupar el conflicto que se armó con todo este tema.

 

Todo esto se da después de algunos gestos de buena voluntad desde Washington. Parece que las dos potencias más grandes del mundo están tanteando una tregua. La guerra comercial no sólo frenó el comercio entre ellas, también hizo temblar los mercados y generó miedos de una recesión global.

 

Las noticias de que Beijing está evaluando exenciones generaron una tibia suba del dólar y un poco de optimismo en las bolsas de Hong Kong y Japón. Algunos analistas dicen que esto podría ser una jugada para bajar tensiones, aunque ninguno de los dos países quiere dar el primer paso para cerrar un acuerdo.

 

Por ahora, China no confirmó nada oficialmente. Mientras tanto, Trump salió a decir que Xi Jinping lo llamó, aunque no aclaró cuándo ni qué charlaron. En las redes chinas y entre empresarios empezó a circular una lista con 131 categorías de productos que estarían en la mira para quedar libres de aranceles. Vacunas, químicos, motores a reacción y chips, entre otros.

En esa línea, empresas americanas y europeas contaron que funcionarios chinos les están preguntando qué cosas importan de EE.UU. que no pueden reemplazar. Algunas farmacéuticas ya zafaron de los aranceles en ciertos medicamentos. Lo mismo pasa con partes de aviones y algunos tipos de chips, aunque otros como los de memoria siguen en la lista negra.

 

Todo esto no significa que China esté bajando la guardia. El Politburó –el núcleo duro del poder chino– dejó en claro que, si hace falta, están listos para bancarse una guerra comercial larga. Pero la situación interna no es fácil: el desempleo viene subiendo, hay deflación y las exportaciones no vendidas se amontonan.

 

Aunque China tuvo superávit comercial gigante el año pasado, sigue necesitando cosas clave de EE.UU, como el etano, esencial para hacer plásticos y remedios. Por eso, algunos sectores están pidiendo que se liberen esos productos de los aranceles.

 

Por esta razón desde China están tanteando una salida más pragmática, pero sin dejar de mostrar fuerza. 

 

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