Protegete de la inflación con estos instrumentos

Días atrás hemos planteado que existe una desventaja puntual a la hora de mantener nuestros ahorros e inversiones en dólares líquidos o en efectivo durante períodos de tiempo prolongados. Esto se debe precisamente a las consecuencias que tiene la inflación sobre el poder de compra del dólar, afectando negativamente el poder adquisitivo de quien lo posea. En la última sección de aquel artículo se dieron a conocer algunos instrumentos de inversión comúnmente utilizados para cubrirse ante una posible suba de la tasa inflacionaria. En línea con aquello, es el objetivo de la actual nota dar a conocer con mayor detalle seis herramientas que, de acuerdo al perfil de riesgo y objetivos de cada inversor, podrían resultar de gran utilidad a la hora de “hedgearse” o cubrirse ante una potencial aceleración de esta variable económica. Cabe destacar, a su vez, que no todos los activos o productos mencionados a continuación se negocian en la bolsa de valores argentina, aunque sí se puede tener acceso a los mismos abriendo una cuenta de bróker o comitente en los Estados Unidos, lo cual puede hacerse de manera rápida y sencilla.

• Commodities: cuando uno escucha o habla sobre esta clase de activos, probablemente lo primero en lo que piensa es en metales, tales como el oro y la plata. Sin embargo, los commodities representan una amplia gama de activos, tales como el petróleo, la soja, el café, la madera y por supuesto metales preciosos, entre ellos el platino y el paladio, además de los mencionados inicialmente. Respecto a los mismos, son considerados un indicador muy preciso a la hora de anticipar los niveles de inflación futuros. Esto se debe a que, al aumentar el precio de los commodities, por “decantación” lo harán también los productos que son fabricados con los commodities como parte del proceso productivo. Por ende, si uno viera en el horizonte un posible incremento de la inflación, serían los commodities un instrumento de cobertura oportuno en el largo plazo.
• Oro: si bien estaría incluido dentro de la categoría anterior, merece la pena destacarlo por separado ya que probablemente sea uno de los métodos (sino el más) tradicionalmente más utilizados como refugio de valor, principalmente en momentos de alta incertidumbre. Sin embargo, si bien el oro puede ser utilizado como cobertura ante una posible suba de la tasa de inflación dentro de un portfolio diversificado, es importante resaltar que puede representar un gran costo de oportunidad en un contexto de tasas de interés altas, donde instrumentos de renta fija (bonos por ejemplo), ofrezcan rendimientos atractivos, algo que por ahora no se vislumbra en el horizonte.
• Real Estate o inversiones inmobiliarias: para aquellos que buscan diversificar su patrimonio, inversiones dentro de esta categoría serían una buena opción para disminuir el riesgo de la cartera. De todas maneras, la compra de una propiedad o la inversión en un negocio inmobiliario requieren de un capital relativamente elevado. Sin embargo, existen productos financieros conocidos como REITs (Real Estate Investment Trust), los cuales son administrados por fideicomisos o fondos de propiedades o establecimientos comerciales (tales como shoppings u hoteles) de manera indirecta. De este modo, los administradores obtienen rentas mensuales por el alquiler abonado por los inquilinos o arrendatarios. Asimismo, no sólo el valor de las propiedades, tanto residenciales como comerciales, tiende a subir con el aumento de la inflación, sino también la renta mensual establecida por los propietarios de los inmuebles, generando así mayores ingresos para el inversor. Es importante tener en cuenta que, en muchos casos, los gestores no son dueños directos de las propiedades, sino que la titularidad de las mismas está “empaquetada” bajo estructuras financieras tales como CMOs o MBS, y por lo tanto no son productos aptos para inversores que no conocen realmente la estructura subyacente.
• S&P 500: el índice más popular del mercado americano ha demostrado que tiende a ofrecer rendimientos positivos en el largo plazo, motivo por el cual suele ser una buena herramienta a la hora de componer una cartera diversificada y, a su vez, parcialmente cubierta ante una posible pérdida del valor adquisitivo del dólar causada por la inflación. Hay que tener en cuenta que, si bien los resultados del índice a largo plazo han sido en general buenos, es un instrumento que en el corto plazo evidenciará la volatilidad típica de una canasta de acciones, por lo cual es crucial considerar bien el horizonte temporal de la inversión, además del propio perfil de riesgo y necesidades financieras de cada persona.
• TIPS (Treasury Inflation-Protected Securities): son un tipo particular de bonos del Tesoro de los Estados Unidos indexados a la tasa de inflación de dicho país. Los mismos pagan un cupón fijo dos veces por año sobre el valor facial o principal, aunque con una interesante peculiaridad. Dicho valor principal es ajustado bimestralmente de acuerdo a la evolución del Índice de Precios del Consumidor (CPI por sus siglas en inglés). Por ende, si el CPI ha aumentado durante los últimos seis meses, el cupón recibido será mayor, ya que el interés se pagará sobre un valor facial mayor.

En conclusión, por un lado resulta crucial remarcar la importancia de reconocer que la relación riesgo-beneficio de cada uno de estos productos es muy diferente comparados entre sí, por lo que es conveniente consultar de antemano la opinión de un profesional. Por otro, si bien es cierto que existen varias alternativas de inversión disponibles en el mundo del mercado de capitales local, también lo es que las mismas aumentan significativamente para aquellos que disponen de una cuenta comitente en el exterior. En muchos casos, uno puede abrir una cuenta de bróker en los Estados Unidos por montos mínimos, tal como ya lo hemos mencionado en este portal.

*Disclaimer legal: Tenga en cuenta que existen riesgos asociados con la inversión en valores, incluida la posible pérdida de capital, de conformidad con la Norma FINRA 2210 (d)(1)(A)​