Google integra su inteligencia artificial Gemini en Chrome para reforzar su posición en el mercado
El buscador integra su inteligencia artificial en el navegador más usado del mundo y busca plantarse frente a rivales como OpenAI, Anthropic y Perplexity.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
Google redobla la apuesta y mete más inteligencia artificial en su producto estrella: el navegador Chrome. La compañía anunció que Gemini, su modelo de IA, ya se está desplegando para usuarios de Mac, Windows y celulares en Estados Unidos. El objetivo es claro: defender su hegemonía frente a la presión cada vez más fuerte de nuevas empresas como OpenAI y Perplexity.
Con esta actualización, los usuarios podrán pedirle a Gemini que resuma o explique lo que aparece en una página web, que los ayude a organizarse en varias pestañas o que directamente ejecute tareas dentro de una misma pestaña, como programar reuniones o buscar videos en YouTube. Rick Osterloh, vicepresidente senior de Google, fue categórico: “Estamos evolucionando el navegador para ayudarlo a aprovechar al máximo la web, de maneras que no creíamos posibles ni siquiera hace unos pocos años”.
La movida no es casual: los navegadores web son la puerta de entrada a la información y hoy concentran la pulseada por el control de la IA de consumo masivo. Chrome, que ya venía siendo el líder indiscutido en distribución de internet, estuvo en la mira del Departamento de Justicia de Estados Unidos por prácticas monopólicas. Sin embargo, la irrupción de la IA generativa cambió el tablero y permitió que Google retuviera a Chrome en su portafolio.
El plan también alcanza a las empresas: en las próximas semanas, los clientes de Google Workspace podrán acceder a estas funciones con “protecciones de datos de nivel empresarial”, según adelantó Mike Torres, vicepresidente de producto de Google. Y más adelante, llegarán funciones “agenciales”, como la posibilidad de pedirle a Gemini que reserve un turno en la peluquería o haga el pedido del supermercado, parte de lo que internamente se conocía como “Proyecto Mariner”.
Hasta ahora, el acceso a Gemini en Chrome estaba limitado a usuarios que pagaban suscripciones especiales. Eso se terminó: con este anuncio, la herramienta se abre a un público mucho más amplio y con más prestaciones.
La jugada de Google deja en claro que siente el aliento en la nuca. Chrome era sinónimo de liderazgo indiscutido en internet, pero con la irrupción de la IA los usuarios ya no dependen solo de un buscador para resolver sus necesidades: pueden hacerlo dentro de un chat o a través de un agente inteligente.
Por eso, la integración de Gemini es también un intento de Google por no perder la iniciativa. La empresa se juega mucho más que la preferencia de los usuarios: se juega la defensa de su negocio central en un momento en que el tablero tecnológico se mueve más rápido que nunca.