El aparente valor de TikTok en Estados Unidos no refleja su potencial tecnológico
El monto, mencionado por el vicepresidente J.D. Vance, queda muy por debajo de estimaciones previas que rondaban los USD 40.000 millones.
Por Gonzalo Andrés Castillo
Redactor especialista en finanzas y mercado de capitales
El negocio estadounidense de TikTok podría cambiar de manos por apenas USD 14.000 millones, una cifra que lo valora más como una compañía madura de energía o alimentos que como una de las plataformas sociales más influyentes del mundo.
El monto, mencionado por el vicepresidente J.D. Vance, queda muy por debajo de estimaciones previas que rondaban los USD 40.000 millones, lo que abre la puerta a una adquisición que algunos analistas califican como “la más infravalorada de la década”.
Entre los potenciales compradores figuran Oracle, de Larry Ellison, y Silver Lake Management, socios estratégicos con vínculos políticos en Washington. Para los inversores estadounidenses, el precio reducido podría representar una ganga, aunque para ByteDance y sus accionistas luce más cercano a un insulto.
La comparación con sus pares evidencia la controversia: mientras el negocio estadounidense de TikTok genera más de USD 10.000 millones en ingresos anuales y cuenta con unos 170 millones de usuarios activos, su valoración propuesta refleja apenas 1,4 veces sus ventas.
Este múltiplo se asemeja al de compañías maduras como ExxonMobil o General Mills, muy lejos de rivales digitales como Meta Platforms, que cotiza cerca de 10 veces sus ingresos, o Alphabet, matriz de YouTube, que lo hace a unas 8 veces.
“Ese precio sugerido parece un robo a plena luz del día”, sostuvo Vey-Sern Ling, asesor de Union Bancaire Privée. Otros analistas remarcan que el algoritmo de TikTok, el activo más codiciado de la aplicación, hace aún más difícil justificar una valoración tan baja.
El acuerdo, que debería cerrarse en 120 días, contempla que ByteDance reduzca su participación en la nueva empresa a menos del 20%, en línea con las exigencias de seguridad nacional de EE. UU. Aunque Donald Trump aseguró que el presidente chino Xi Jinping dio luz verde al plan, Pekín no confirmó oficialmente su postura.
La operación sigue rodeada de incertidumbre: desde el rol de los compradores, que no son compañías de internet ni de consumo masivo, hasta el desenlace político entre Washington y Pekín. Por ahora, la decisión parece más impulsada por la Casa Blanca que por criterios de mercado.