Salario Mínimo, Vital y Móvil: se confirmó un aumento del 9.3% pero siguen los conflictos
A pesar del aumento acumulado, los sindicatos exigen un salario mayor al fijado y preparan un paro general el 10 de abril en rechazo a la política salarial del Gobierno.
El Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) se ha ajustado en un 9,3% hasta el momento, alcanzando en abril un total de $296.832 por mes y $1.484 por hora, de acuerdo a la Resolución 17/2024 del Gobierno. Este aumento responde a las condiciones económicas actuales, aunque todavía queda pendiente la definición de nuevas negociaciones para los próximos meses.
El Gobierno planea solicitar un incremento del 1% mensual durante el segundo trimestre, lo que haría que el SMVM llegara a $306.000 en junio. Sin embargo, esta propuesta ha encontrado resistencia por parte de los sindicatos, que mantienen sus demandas elevadas de un salario mínimo de $600.000.
Ante esta situación, la Confederación General del Trabajo (CGT) y las Centrales de Trabajadores de Argentina (CTA) ya organizan un paro general, programado para el 10 de abril, y convocan a una movilización el día anterior. Esta acción busca expresar el descontento con la política salarial vigente del Gobierno.
Los líderes sindicales advierten que, si no se atienden sus demandas, el paro podría extenderse y generar un impacto en la economía. La tensión entre el Gobierno y los trabajadores se intensifica, y las próximas semanas definirán el rumbo de las negociaciones salariales en el país.
Analistas sugieren que la inflación podría obligar a las autoridades a reconsiderar su postura. La respuesta a las demandas de los trabajadores será clave para evitar un conflicto mayor en el país. Mientras tanto, el sector empresarial también expresa su preocupación por el impacto que un aumento significativo del salario mínimo podría tener en la estabilidad laboral y la competitividad. La incertidumbre en torno a las negociaciones ha llevado a muchos a cuestionar la viabilidad de mantener empleos.
Los sindicatos insisten en que un salario justo es esencial para garantizar el bienestar de los trabajadores, mientras que el Gobierno busca equilibrar las demandas con la realidad económica del país. Se espera que en la próxima reunión de negociación, tanto el Gobierno como los sindicatos presenten sus propuestas finales. Esta presión en cuanto a amenazas de paros podría influir en la estrategia del Ejecutivo.