Nuevo revés para Argentina: embargarán activos en EEUU por deudas de 2001
Los coletazos del default de diciembre de 2001 siguen en pie por un 3% de fondos buitre que lograron victorias judiciales los últimos días.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
La Justicia de EE.UU. dio luz verde para que se confisquen activos que el Estado argentino tiene guardados en una cuenta del Banco Central en la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).
La jueza Debra Ann Livingston, de la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York, confirmó el fallo en primera instancia de la jueza Loretta Preska, de la Corte del Distrito Sur de esa ciudad, quien permitió que los acreedores de la Argentina confisquen bonos del Tesoro de Estados Unidos que el país tenía en su poder.
Estos son papeles que se usaron como garantía de pago de los bonos Brady, emitidos a principios de los 90 y que vencieron en marzo de 2023.
Según señaló el experto en mercados Sebastián Maril, que sigue de cerca los juicios por la deuda impaga de la Argentina, "en sólo un mes, la Argentina perdió la apelación por el cupón PBI en Londres (1.500 millones de dólares); recibió un fallo sumario por deuda en default (140 millones de dólares); perdió la certificación del fallo del Ciadi en Estados Unidos en el caso Aerolíneas Argentinas (340 millones de dólares), y perdió la apelación por embargos de activos soberanos en el caso de deuda en default (420 millones de dólares). Repito, dejar que hablen los jueces no es una estrategia legal, sino una excusa para no tenerla”.
Los fondos Attestor Master Value, Trinity Investments y White Hawthorne, Bison Bee LLC y Bybrook Capital Master compraron deuda argentina en default desde 2001 a bonistas que nunca entraron en los tres canjes que lanzó el país en 2005 (con Néstor Kirchner), 2010 (Cristina Kirchner) y 2016 (Mauricio Macri). Se estima que representan menos del 3% del total de los bonistas originales que mantuvieron la deuda impaga y le hicieron juicio al Estado argentino, conocidos comúnmente como holdouts o fondos buitres.
En total, la Argentina debe unos 420 millones de dólares por la deuda impaga de 2001.
Son papeles del Tesoro de Estados Unidos cupón cero que la Argentina tenía como garantía de pago de los bonos Brady que el país emitió a principios de los 90, cuando refinanció la deuda acumulada de la década anterior, gracias a una política de beneficios que lanzó el entonces secretario del Tesoro estadounidense, Nicholas Brady.
Si la Argentina no pagaba los intereses de los bonos Brady, los acreedores podían cobrarse los papeles del Tesoro estadounidense que estaban en una cuenta especial en la Reserva Federal de Nueva York.
Durante 2005, esos papeles ya fueron parte de una confiscación cuando la Argentina lanzó el canje por la deuda impaga de 2001. Cuando se reabrió el canje en 2010 y luego en 2016, los tenedores de los bonos Brady cambiaron su deuda en default y liberaron la garantía.