El Tesoro de Trump apuesta fuerte por la Argentina y lanza paquete de asistencia millonario
El Tesoro norteamericano anunció una batería de medidas de apoyo financiero que van desde la compra de bonos hasta un swap por US$ 20.000 millones. Milei festejó en X con un mensaje alineado al trumpismo.
Por Eric Nesich
Periodista especializado en Economía y Finanzas
En una mañana cargada de expectativa en Manhattan, finalmente se conoció el anuncio que el equipo argentino venía esperando como agua en el desierto. El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, confirmó que su país está dispuesto a comprar bonos en dólares, habilitar un crédito stand-by y cerrar una línea de swap por 20 mil millones de dólares con el Banco Central. Todo dicho desde su cuenta de X, justo en la apertura de los mercados.
El mensaje no quedó ahí. Bessent subrayó que Washington incluso está dispuesto a meterse en la deuda primaria y secundaria de la Argentina, y que ya conversan con el gobierno de Javier Milei para terminar con la exención fiscal que favorece a productores de materias primas que liquidan divisas afuera. Una señal clara de que la coordinación es más que discursiva.
En Wall Street la sorpresa fue total. Analistas como Alejo Czerwonko, de UBS, señalaron que este nivel de compromiso norteamericano es “más de lo que cualquier experto hubiera proyectado hace unas semanas” y lo catalogan como uno de los respaldos más relevantes del Tesoro de EE.UU. a un mercado emergente en las últimas décadas.
El martes, Milei ya había compartido un cara a cara de 20 minutos con Donald Trump, donde el exmandatario lo bendijo públicamente y hasta deslizó que podría reelegir en 2027. Un gesto que en la lógica política de la Casa Blanca versión Trump pesa tanto como el anuncio de dólares frescos.
Para reforzar el mensaje, Bessent volvió a destacar los logros de Milei en materia fiscal y de desregulación, al mismo tiempo que acusó a la oposición de fogonear corridas cambiarias. Además, prometió que hay empresas norteamericanas listas para invertir en Argentina si el resultado electoral favorece al libertario.
El ministro de Economía, Luis Caputo, también se sumó al clima de euforia. “Argentinos, empieza una nueva era. A trabajar todos juntos para hacer nuestro país grande nuevamente”, escribió en su cuenta, replicando el tono épico de su jefe político.
El respaldo de Washington no es solamente un guiño financiero: es un mensaje geopolítico de primera línea. En un contexto global convulsionado, Estados Unidos decide jugar fuerte con la Argentina de Milei, no solo apostando a su programa económico sino también consolidando un eje político con Trump de cara al futuro.
Queda por ver cómo reacciona el mercado local y, sobre todo, cómo se administra este capital político y económico. La magnitud del anuncio abre una ventana inédita, pero el desafío es que no se diluya en expectativas y slogans. Si Milei logra traducir este apoyo en estabilidad duradera, podría estar escribiendo el capítulo más importante de su presidencia.
