El Banco Central modificará los encajes para el efectivo mínimo de los bancos

Desde noviembre, la autoridad monetaria que encabeza Santiago Bausili endurece las reglas de juego para los bancos. Ahora deberán mantener casi todo su “efectivo mínimo” todos los días, con el objetivo de darle más estabilidad al sistema financiero y evitar sobresaltos en las tasas.

Por Eric Nesich

Periodista especializado en Economía y Finanzas

Hace 7 horas

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) cambió vez en la normativa del famoso “efectivo mínimo”, ese porcentaje de dinero que las entidades financieras están obligadas a mantener inmovilizado como respaldo de sus depósitos. A partir de noviembre, ese piso no podrá ser inferior al 95% diario, según la Comunicación A 8350 publicada este jueves.

 

En criollo, esto significa que los bancos deberán tener casi todo su encaje listo cada día, y no podrán relajarse ni un poco. El cálculo, que antes se hacía sobre promedios más flexibles, ahora se endurece: la exigencia será sobre el promedio mensual de los saldos diarios, con una base mínima que garantiza que siempre haya liquidez en el sistema.

 

El objetivo de esta medida es claro: el Banco Central busca que el dinero disponible en los bancos sea más estable y predecible, evitando movimientos bruscos en las tasas de interés. Es una forma de ponerle un poco de orden a la plaza financiera, que suele moverse con la sensibilidad de una aguja de reloj suizo ante cualquier cambio de humor económico.

 

El anuncio llegó justo después de que el Gobierno nacional completara una licitación de deuda por $6,86 billones, con un rollover del 57%. En esa operación, el Tesoro apuntaba a refinanciar vencimientos por $12 billones, y aunque no llegó a cubrir todo, logró mantener el interés del mercado luego del envión político que dejó el resultado de las elecciones legislativas.

Luis “Toto” Caputo, el ministro de Economía, fue quien comandó la operación mientras sigue pendiente la designación del nuevo secretario de Finanzas, tras la salida de Pablo Quirno hacia la Cancillería. En Economía destacan que la licitación fue una señal de confianza hacia el programa financiero del Gobierno, en un contexto donde cada punto de financiamiento cuenta.

 

Desde el BCRA aseguran que la medida sobre el efectivo mínimo no busca complicar a los bancos, sino reforzar la previsibilidad del sistema. “Es un paso más en la normalización monetaria”, deslizan cerca de Bausili. En el mercado, sin embargo, algunos analistas advierten que el endurecimiento de encajes podría restar algo de oxígeno al crédito y tensionar la liquidez de corto plazo.

 

De todos modos, el mensaje es claro: el Central quiere un sistema más ordenado, con menos margen para la especulación y más control sobre los pesos que circulan. En un momento en que la economía busca estabilizarse tras años de desequilibrios, cada ajuste técnico como este puede marcar la diferencia entre un rebote firme o un nuevo tropezón

 

¿Quiere recibir notificaciones de alertas?