Cómo es cobrar en criptomonedas
Cada vez son más los argentinos que trabajan para el exterior y perciben su sueldo por medio de monedas digitales en billeteras virtuales.
Por Agustín Dirienzo
Ya son muchos los argentinos que tomaron la decisión de trabajar para empresas de afuera y eligieron la posibilidad de cobrar sus salarios en criptomonedas. Por lo general, ya sea que facturen por sus servicios o posean un sueldo, el pago es en algún tipo de Stablecoin, es decir un criptoactivo estable y comúnmente vinculado o atado al dólar. Como su cotización sigue a la divisa estadounidense, sería lo mismo que cobrar en dólares. Quizás el más conocido sea el DAI, pero hay muchas otras como Theter, USDC, y hasta EURS, sujeto a la moneda europea.
Según los datos que surgen del Reporte Global de Contratación de Talento Internacional, calculado en 2021 y realizado por la empresa Deel (compañía estadounidense especializada en servicios de contratación y pagos internacionales a contratistas), los argentinos son cada vez más elegidos por diversas empresas internacionales para contratar sus servicios. Así, y por medio de billeteras virtuales sin ningún tipo de restricciones cambiarias o cepos, acreditan una determinada cantidad de dólares virtuales en su haber, lo cual resulta muy tentador considerando el proceso inflacionario que arrastra el peso argentino desde hace décadas. Además, no se encuentran bajo el control del Banco Central, o el Gobierno, no hay posibilidades de “corralito”, confiscación, pesificación o embargos. Esto es básciamente el motivo del por qué surgen las critpomonedas, evitar el control centralizado: Solamente sus propietarios pueden acceder a ellas.
Hay desventajas
Para materializar este ingreso en la moneda corriente del país, es necesario hacer algunas transacciones adicionales a fin de transferir los pesos a las cuentas bancarias y extraer el dinero en efectivo. Cada movimiento y operaciones tiene un pequeño costo que de a poco van reduciendo el importe original. Por otra parte, de momento las criptomonedas no están reguladas, no existe un organismo estatal de supervisión y por ello puede resultar un problema justificar los ingresos ante el fisco y bancos.
