Wanda Nara, sin filtros sobre su divorcio y las acusaciones que enfrenta de Mauro Icardi: "No robé ni fui infiel"

En un escenario cargado de tensión, Wanda Nara se encontró frente a los medios, justo antes de ingresar a los Tribunales de Tigre para una de las audiencias que mantiene con su ex pareja, el futbolista Mauro Icardi. Durante esta inesperada charla, la modelo no se guardó nada y abordó con firmeza los rumores y acusaciones que circulaban en torno a su separación.

Con una mirada decidida, Wanda contestó a la pregunta de los periodistas sobre las acusaciones que la señalaron como "ladrona" e "infiel". “Se me trató de ladrona, de infiel y yo no fui ni ladrona ni infiel, ni robé. Cada uno se tiene que hacer cargo de lo que hizo. El tiempo cura todo”, expresó, dejando entrever su descontento con la narrativa creada a su alrededor.

La conversación tomó un giro incisivo cuando se mencionó a Lara Piro, abogada de Icardi, quien había tachado a Wanda de “una mala persona”. La respuesta de la mediática fue directa y sin rodeos. “Su cliente me conoce y estuvo 12 años en pareja conmigo, así que me parece una falta de respeto hablar así de la madre de sus hijas, pero cada uno se maneja como quiere”, afirmó, revelando la gravedad de la situación y su desdén por el ataque.

En una ola de cuestionamientos, los periodistas le preguntaron sobre la decisión de la Justicia de restringir sus redes sociales. Wanda no escatimó en su respuesta: “Sí, obvio, es una injusticia. Nunca había escuchado de ningún famoso, ni de nadie que trabaje con las redes que haya tenido un fallo así. Me parece extraño, porque hay incumplimientos de todas las partes”. Con esta declaración, dejó claro que no tiene intenciones de aceptar pasivamente lo que considera una decisión injusta.

Su trayectoria también fue punto de referencia en la conversación. “Trabajo desde los 5 años, hago publicidades. Y la verdad que no me beneficia ni me perjudica. Sigo de la misma manera cuando estoy trabajando. Ahora vengo de hacer una publicidad”, destacó, reafirmando su compromiso con su carrera y desmintiendo cualquier noción de que su vida laboral se vería afectada por esta disputa.

Para cerrar, Wanda Nara envió una clara advertencia sobre la ética en los casos familiares: “Los abogados en un caso de familia tienen que tener respeto. Yo nunca lo escuché a él hablando mal de la otra parte. Simplemente todo es contar realidades”. Un mensaje contundente que reafirma su postura ante los conflictos que la rodean, mientras el destino de su situación familiar y legal sigue en el aire.