Gigante de Wall Street reveló que apuesta fuertemente por este Cedear

Lazard Asset Management, la empresa estadounidense que gestiona activos por más de USD 200.000 millones, estuvo comprando acciones de Taiwán Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) hasta convertir al fabricante de chips en la segunda mayor posición dentro de su fondo de mercados emergentes.

Luego de que Warren Buffett vendiera el 86% de su tenencia de TSMC en febrero, James Donald, jefe de mercados emergentes de Lazard, dijo que el foco en la compañía taiwanesa se debe a que es un activo "mucho más mal valorado hoy que antes".

Para fundamentar su postura, el experto citó la relación precio-beneficio (PE, por su sigla en inglés) que cayó hasta las 13 veces desde más del doble, en comparación con un retorno sobre el capital (ROE) superior al 30%.

Desde que la gestora comenzó a comprar acciones de TSMC en 2006, los responsables de la estrategia pensaron numerosas veces en vender la participación por la sobrevaloración. No obstante, la situación se revirtió.

"Estábamos muy cerca de vender toda nuestra posición, todavía teníamos algo de ventaja, pero no mucho, y luego las acciones se redujeron en el transcurso del año pasado. Desde entonces, hemos ido sumando a nuestras posiciones", relató Donald.

A día de hoy, las acciones de TSMC acumulan una suba del 16% en lo que va del año y es el activo más importante por ponderación dentro del índice MSCI centrado en mercados emergentes. Según datos recopilados por Bloomberg, tiene 30 de 33 calificaciones son de compra y ninguna es de venta.

Invertir en TSMC desde Argentina

Para aquellos interesados, desde Argentina se puede invertir en TSMC de manera rápida y sencilla. Solo basta con abrir una cuenta comitente en una sociedad de bolsa regulada por la Comisión Nacional de Valores como lo es Bull Market Brokers, proceso gratuito que no llevará más de cinco minutos, y, tras depositar los fondos deseados, adquirir Cedears.

Los Cedears o Certificados de Depósito Argentinos son instrumentos que equivalen a comprar la acción subyacente que cotiza en el exterior, pero se pueden operar en pesos (BCBA: TSM) y siguen la evolución del dólar CCL, por lo que permiten evadir el riesgo argentino y, a la vez, cubrirse de un eventual salto cambiario.